Para Mariel Méndez, la mezcla de pintura y moda ha sido la clave perfecta para destacar en su industria a través del proyecto “MARALOVE”, en el que el color y los detalles son parte esencial de su personalidad como creativa.
Aunque en un inicio Mariel Méndez sólo hacía retratos, hace 10 años decidió que para contar la historia sobre sus pinceladas, debía presentar un contexto físico, por lo que realizó una sesión fotográfica con prendas estilizadas que portó su hermana, Ileana Méndez.
“La vestí y pedí que usara distintos atuendos acorde al relato y así lo fusioné; después, con el tema vintage, adquirí piezas de segunda mano e hice upcycling, al restaurarlas o agregarles cosas”, comentó Mariel Méndez, quien es originaria de Tijuana.
“Todo inició por la necesidad de crear un poco más de contenido y se convirtió en una fusión; surgió con naturalidad, pues las clientas me pedían cosas para que, en vez de tener un cuadro mío colgado en su hogar, utilizaran mis creaciones en una chamarra o vestido”.
Durante esta década, Mariel Méndez ha crecido tanto en experiencia como técnica y confiesa que se ha vuelto más exigente con su trabajo; sin embargo, lo que aún conserva es la identidad de sus trazos, la cual está inspirada en la infancia.
“Ejercí como maestra de preescolar duran-te 10 años y, para mí, los niños son lo máximo, mi más grande iluminación, de hecho, me basé en ellos para desarrollar mi estilo, el cual lo considero muy natural y sin sentido, ya que son la sencillez que debería existir en los adultos al imaginar y jugar”, explicó Mariel Méndez.
Algo que también imprime en sus lienzos son sus sentimientos, pues acostumbra capturar y escribir sus vivencias para que cuando se junten llegue el momento de que tomen forma y así fue como surgió su colección de base “Moody Girls”.
Esta serie salió desde el inicio de su carrera y la nutre constantemente; consiste en retratos en los que, sin darse cuenta, refleja su estado de ánimo.
“La idea de esta línea es pintar mujeres con una expresión, ya sea en sus ojos o boca, siempre hay algo, de ahí surge el ‘mood’”, contó Mariel Méndez.
“Estos personajes tienen un semblante en su rostro que es inexplicable porque con el tiempo me di cuenta de que salían conforme a cómo me sentía”.
En la colección ‘Sentiment’ hay una perspectiva de la vida que se basa en emociones y sentimientos, está programada para hacerla durante todo el año”.
UN NUEVO COMIENZO
Ahora, Mariel Méndez planea salir de su zona de confort y enfocarse en nuevos retos que le permitan mostrar otra cara de su arte y horizontes para expandirse.
Su primer desafío de 2024 fue el mural en el barrio de Hillcrest, en San Diego, en el que colaboró con otro artista para expresar un sentido de comunidad.
“Este año decidí retarme para hacer cosas diferentes, quiero atreverme a exponer en Europa porque es un mercado exigente y específico, si Dios quiere, será en octubre”, dijo Mariel Méndez.
“Quiero participar con otros creativos, siento que viví mucho tiempo trabajando sola y las expectativas fueron muy altas; ahora, quiero implementar mis creaciones con alguien más, como equipo”.
De este modo, su reciente colección “Sentiment” es la encargada de romper con la tradición y se atreve con fotografías tomadas con el celular, en las que retrata situaciones totalmente cotidianas y sencillas.
“Son imágenes naturales y casuales, que, de repente, no tienen sentido; no están tomadas con una cámara profesional, a diferencia de las de antes”, expresó Mariel Méndez.
Sentimos a diario y vivimos experiencias todo el tiempo, así que es muy fácil crear contenido sobre ti mismo".
DESAFÍO PROPIO
Con la colección “Sentiment” Mariel Méndez busca plasmar escenas desde una perspectiva cotidiana y natural, por lo que toma las imágenes con su celular, ella misma hace el stylist y su hermana, Ileana Méndez, es su modelo.