¡VACACIONES!
SIN DESCUIDAR EL BIENESTAR
Ya tienes listo el traje de baño, las gafas de sol y un buen libro para acompañarte a las vacaciones de verano. ¿Pero, incluiste en tu lista una estrategia para no descuidar tu alimentación?
Claro, escapar de las rutinas tal vez sea lo más importante del plan, pero alimentarte bien no solo mejora tu salud, sino también te puede llenar de energía para las aventuras, señalan especialistas en nutrición.
DECÁLOGO A CONSIDERAR
Conservar los buenos hábitos de alimentación donde estés de viaje te mantendrá activo y te ayudará a contrarrestar malestares. Aquí un decálogo para que tomes nota.
1.- Planifica los bocadillos
Para los pasajeros que tendrán largos vuelos, encontrar alimentos saludables puede ser difícil, dice la nutrióloga Katie Krieg, quien también es agente de viajes. Las opciones más económicas en los aeropuertos tienden a ser papitas o dulces, ambos altos en carbohidratos y bajos en fibra y proteína.
- En cuanto a grasas y proteínas saludables, Krieg, prefiere las semillas, las nueces o los garbanzos horneados. Para largos trayectos, suele empacar un huevo cocido, un sándwich de mantequilla de cacahuate o una ensalada de quinoa, queso feta y tomate.
- Al igual que Krieg, la nutrióloga Marisa Moore sugiere planificar las meriendas; a ella le gustan los pistaches, las semillas de calabaza, las almendras y ocasionalmente un sándwich de mantequilla de cacahuate y plátano.
- Pero si no empacaste nada y te encuentras en una terminal típica o en una tienda de conveniencia de una carretera, no te preocupes. Hay opciones. Tal vez no se encuentren bien a la vista, pero a veces si te diriges hacia la parte de atrás, es posible que encuentres uno que otro plátano, o un recipiente preenvasado de uvas frescas, dice Moore. “Casi todos los sitios tienen mantequilla de cacahuate, como mínimo”.
- Los surtidos de frutas secas con nueces también son buenos, agrega la nutrióloga Theresa Gentile, afincada en Nueva York y portavoz de la Academia de Nutrición y Dietética. Elige opciones que tengan menos chocolate.
2.- No esperes para hidratarte
Mantenernos hidratados es importante cuando viajamos, entonces, “lo primero que debemos hacer es darle prioridad a tomar agua”, comenta Marisa Moore. Y al igual que con las meriendas, “hay que planificarlo”.
- Lleva una botella plegable vacía que puedas llenar. “Casi todos los aeropuertos principales tienen estaciones de agua al pasar el área de seguridad para que puedas rellenar tu botella”, comentó Moore.
- También recomienda llevar frutas hidratantes, como uvas o naranjas.
3.- Hospedaje con opciones
Alimentarte bien debe ser una de tus metas de viaje, dice Moore, así que siempre que puedas, elige hoteles y lugares para dormir donde sepas que tendrás alternativas saludables.
4.- Aprovecha el mini refrigerador
Haz que ese pequeño refrigerador del hotel se convierta en tu mejor amigo, recomienda la nutrióloga Theresa Gentile. Puedes llenarlo de frutas y verduras frescas.
- Eso no quiere decir que evites saborear un delicioso helado o los platillos tradicionales del lugar que visitas, pero la fruta te puede ayudar a mantenerte hidratado en los días de excursión y muy calurosos, sin recurrir a bebidas endulzadas.
5.- Ayúdale a tu estómago
Las frutas, verduras y otros alimentos altos en fibra son, por supuesto, parte de una buena dieta para el corazón a largo plazo. Pero también son útiles para aliviar una situación inmediata de la que se quejan muchos en las vacaciones.
- “Muchas personas sufren de estreñimiento cuando viajan”, dice Moore. Los líquidos y la fibra ayudan a aliviarlo.
6.- Haz de la comida una aventura
Las comidas deben ser parte de la diversión veraniega, apunta Krieg. Como amante de la comida, ella considera que los mercados al aire libre o los supermercados son una “estupenda experiencia cultural”.
- Los aventureros culinarios pueden encontrar opciones deliciosas y saludables. En Costa Rica, por ejemplo, Moore descubrió el gallo pinto, un plato de frijoles negros, salsa, pimientos morrones y arroz. “Es un plato delicioso y lleno de sabor” que cuenta con mucha fibra y proteína.
- Algunos lugares pueden presentar más desafíos que otros, ejemplifica Krieg, pero siempre puedes tratar de combinar con ensalada, verduras y frutas locales.
7.- Comparte las porciones
Krieg sugiere compartir platos entre las personas que viajan para consumir porciones más pequeñas. No solo nos deja espacio para una ensalada o un acompañamiento de verduras, sino que nos da la oportunidad de probar más alimentos.
8. Balancea el alcohol
Si decides tomar alcohol, la hidratación es de especial importancia, comenta Krieg. En ese caso, asegúrate de tomar mucha agua natural.
- Moore agrega que aunque el alcohol puede hacerte sentir más relajado, también puede interferir con el sueño. Por lo tanto, si vas a beber, aparta más tiempo para descansar.
9.- Una actitud saludable
Tampoco se trata de obsesionarte con la alimentación o sentirte culpable por lo que comiste. Entonces, si tu lugar favorito de vacaciones no ofrece opciones ideales, o si te encuentras en una parada de camiones donde la oferta de comida es más limitada, “haz lo mejor que puedas con lo que tienes a tu disposición”, recomienda Moore. “Y entonces, en la próxima comida, tal vez puedas optar por un poco más de frutas y un poco más de verduras”.
10.- La clave, moderación
Krieg enfatiza el equilibrio y la moderación. “Creo que esa es la clave para que no solo tengamos una buena relación con la comida, sino también para una vida saludable”.
- Así que mientras exploras el mundo, “diviértete. Pide esos alimentos fuera de lo común que generalmente no tienes la oportunidad de probar. Incluye algunas frutas y verduras. Y entonces, cuando regreses de un viaje, sigue haciendo lo mismo”.
- Con información de Michael Merschel / American Heart Association vía AP.
DERECHOS RESERVADOS 2024