Una vez más la mala calidad del agua del Río Sena no permitió que la prueba por la disputa de las medallas se realizara en la prueba varonil y la afición resultó afectada.
Rafael pagó 300 dólares, 5 mil 500 pesos aproximadamente, por un lugar en la tribuna. Era la última oportunidad para el cubano, asiduo a las competencias olímpicas, de ver el triatlón porque hoy por la tarde vuele a Miami.
“Estoy seguro que las personas que organizan el evento en esta ciudad también estarán molestos. Para personas como yo que nos vamos hoy…no es reembolsable, te habían advertido. Ahí arriba en esa grada está mi asiento”, señala Rafael a CANCHA y quien ha asistido a tres justas olímpicas.
El cubano tuvo otra decepción en París, en la ceremonia de inauguración el boleto que compró solo le permitió ver la parte trasera de los botes. “En general las Olimpiadas han estado bonitas. París se ha lucido, pero han pasado dos cosas que me han dejado un gran vacío”.
CAMBIAN DE PLANES
Una familia española madrugó desde las 5 de la mañana para ver el triatlón y fue hasta llegar al Puente Alejandro III que los voluntarios les informaron que la prueba no se realizaría el día de hoy.
“Nos hemos levantado a las 5 de la mañana para poder llegar al triatlón a tiempo y cuando hemos llegado nos han dicho que se ha cancelado y estamos desilusionados y reorganizando todo el plan porque ya teníamos las sedes a donde íbamos a ir y ahora tenemos que cambiar. De momento vamos a buscar un sitio donde desayunar”, cuenta la familia Muñoz.
“La parte positiva es qué hay mucho ambiente y estamos un poco decepcionados. La realidad es que no hemos dormido absolutamente nada y seguro tendremos la oportunidad de ver algo chulo y divertido. No nos dijeron el motivo ni nada de nada. Hay gente que está esperando y todavía no tiene la información”.
La prueba se postergó para el día de mañana después de la prueba femenil.
