MEDALLA DE ORO

En salud mental

Pocas personas entienden el impacto a la salud mental de estar sometido a constante presión, autoexigencia, ansiedad y ánimo de perfeccionismo como las y los atletas olímpicos; pero, aunque no se dediquen al deporte de alto rendimiento, hay quienes experimentan en el día a día la misma alteración emocional.

EJEMPLO DE RESILIENCIA

La velocista estadounidense Natasha Hastings, medalla de oro en 2008 y 2016, soportó miles de horas de entrenamiento para dominar en los 400 metros. Ha experimentado tanto la alegría del triunfo como el golpe de quedar fuera de una competencia.

Hubo veces en las que su inmersión en el deporte era tal que el resto de su vida parecía borrosa. “Un día abrí mi pasaporte y vi todos esos sellos”, narra. “Y fue como ‘no recuerdo haber ido a esos lugares'”.

Como excampeona olímpica que habla directamente de sus experiencias con la psicoterapia, Hastings es parte de una ola de atletas élite que han atraído la atención hacia la salud mental, con lecciones que son válidas para todas las personas, más allá de los deportes.

La atleta estadounidense Natasha Hastings, medallista olímpica en 2008 y 2016. Foto: tomada de FB.

Hastings incluso se convirtió en una consejera profesional certificada. Pero, aunque ella y celebridades como la gimnasta Simone Biles y el nadador Michael Phelps han ayudado a desestigmatizar el asunto, la conversación pública sobre la importancia de atender la salud mental en los atletas, y, en general, apenas está comenzando.

UN PROBLEMA DE TOD@S

Julia Cawthra, quien provee servicios psicológicos al Comité Olímpico y Paralímpico de Estados Unidos, instancia que tiene más de una docena de expertos acreditados en salud mental para apoyar a los atletas, piensa que lo que se ha hecho público hasta ahora apenas es la punta del iceberg.

  • Los atletas enfrentan muchos de los mismos problemas de salud mental que el resto de las personas, señala Cawthra. Algunos también buscan ayuda para afecciones relacionadas con su deporte, ya sea porque esperan ganar una ventaja en su rendimiento o porque lidian con desafíos como los twisties, un bloqueo mental que hizo que Simone Biles, la gimnasta más condecorada de todos los tiempos, se retirara de varias competencias en el 2021.
Simon Biles en su regreso a los Juegos Olímpicos de Francia 2024, tras una crisis de salud mental. Foto: Francisco Seco / AP.
  • Michael Phelps, el nadador que más medallas ha ganado en la historia de los Juegos Olímpicos, ha contado sobre sus experiencias con terapia por ansiedad, depresión y pensamientos suicidas.
Michael Phelps, nadador estadounidense que ganó 28 medallas. Foto: Julio Cortez / AP.
  • Pero algunos desafíos únicos para los atletas están claros. “La magnitud de la presión es increíble”, dice Hastings, y esto va más allá del deseo de ganar por el simple hecho de ganar.

  • Los atletas jóvenes quizás consideren los deportes como una forma para poder pagar la educación o incluso sacar a su familia de la pobreza. En los Juegos Olímpicos, cada corredor sabe que “si no salgo de aquí con una medalla, mi patrocinador de calzado podría abandonarme, o mi salario podría reducirse”, ejemplifica Hastings.
  • Cawthra señala que, aunque los atletas élite en todos los deportes sienten presión, las expectativas para los competidores olímpicos y paralímpicos, que representan a todo un país y solo tienen una oportunidad de ganar cada cuatro años, están a otro nivel.
  • La presión puede ser útil, apunta la psicóloga, si ayuda a que la persona deje a un lado las distracciones. Pero el exceso de concentración también puede hacer que una persona piense: “Esto es lo único que importa”. Para los ganadores, eso significa que una medalla puede servir como validación, pero para aquellos que no la logran podría significar lidiar con sentimientos de “estoy desperdiciando mi vida”.

DE LA ÉLITE OLÍMPICA A LA VIDA COTIDIANA

Quienes no son atletas también lidian con la desilusión, señala la psicóloga Julia Cawthra, aunque “no todos nosotros tenemos que mostrar eso delante del mundo”. Aun así, dice, las personas de a pie pueden beneficiarse de algunos de los mismos enfoques que ayudan a los atletas de alto rendimiento.

1. PREVENCIÓN

Lo primero es comprender que la salud mental es como cualquier otro aspecto de la salud, requiere atención antes de que se convierta en una crisis. Abordar la salud mental no es necesariamente arreglar algo que está roto, indica Cawthra. Puede tratarse de optimizar lo que tienes: “No tenemos que estar enfermos para mejorar”.

2. TRAZAR OBJETIVOS

Si se trata de enfrentar la presión, un profesional de la salud mental podría ayudar a la persona a replantear la forma en que ve sus objetivos. Para un atleta olímpico, por ejemplo, eso podría significar no enfocarse en ganar una medalla, porque no tiene control sobre eso.

3. ENFOQUE

La psicoterapia también ayuda a manejar las expectativas. Muchas veces, alguien sentirá como si tuviera que hacer algo especial para estar a la altura de las circunstancias, señala Cawthra, “cuando en realidad, si actúan con normalidad, eso es todo lo que se necesita. Porque tratar de hacer demasiado es sencillamente tan peligroso como no hacer lo suficiente”.

4. FALLAR ES HUMANO

También es importante aprender a pedir y aceptar la ayuda. Cawthra era jugadora de voleibol universitario cuando aprendió esta lección de un psicólogo deportivo. En esa época, ella era una perfeccionista, algo común en personas muy exitosas, atletas y no atletas por igual. “Y si algo no sale perfectamente, entonces es un fracaso”. Pero comprendió que era aceptable tratar, fallar, aprender de la experiencia y tratar otra vez. El psicólogo “me abrió los ojos al hecho de que no tienes que hacer nada de eso sola. Hay veces en que se requiere un esfuerzo de equipo para llegar adonde tratas de ir. Y no siempre bastan el esfuerzo, la tenacidad y la optimización. En ocasiones se trata de darte un pequeño descanso”.

5. SÉ AMABLE CONTIGO

En la fase temprana de su trayectoria en el atletismo, el enfoque de Hastings en el trabajo duro rindió frutos. Fue parte del relevo 4×400 metros que ganó la medalla de oro en los Juegos de Beijing en el 2008, y esperaba representar a Estados Unidos en Londres en el 2012. En vez de eso, no calificó. Un psicólogo deportivo la ayudó a ser menos crítica de sí misma y a cambiar su enfoque, de la autocrítica y el tormento involucrados en cada carrera, a un enfoque más optimista.

6. VISIÓN INTEGRAL

Lidiar con los desafíos del día a día es algo que deben hacer todas las personas; el trabajo de Hastings como consejera en salud mental a menudo consiste en ayudarles a entender que cualquiera que sea el problema mental con el que luchan, es normal. Los atletas a menudo necesitan ayuda para verse a sí mismos como seres humanos completos, dice la exvelocista. Sí, necesitan saber cómo dar lo mejor de ellos mismos en su rendimiento, pero también necesitan tener respuestas para: “¿Te sientes seguro en quién eres? ¿Sabes quién eres? ¿Puedes manejar tu ansiedad, o tu depresión, o tu trastorno por déficit de atención e hiperactividad? Es mucho más que simplemente lo que haces en la pista”.

Y ADEMÁS...

El bienestar no sólo tiene que ver con la psicoterapia, apunta la especialista Julia Cawthra. Existen otros pilares que son igualmente importantes para contribuir a sentirse bien, entre ellos:

  • Practica de ejercicio regular
  • Alimentación balanceada
  • Sueño y descanso de calidad
  • Hacer comunidad
  • Compartir con amigos
  • Socializar

Como terapeuta, Hastings les dice a las personas que solicitan su ayuda que atender la salud mental requiere el mismo tipo de dedicación que un atleta invierte en su salud física. “Tienes que practicar esto tal como practicas salir a jugar cualquier deporte en el que participas. Sencillamente, no lo vas a lograr dentro de la sala de terapia”. Los atletas olímpicos, por sus hazañas físicas, pueden parecer de otro mundo. Pero no son tan diferentes en lo que se refiere a lidiar con la salud mental, agrega.

Con información de Michael Merschel / American Heart Association vía AP

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