La historia de amor entre Gabriela Uribe y Diego Bernardi comenzó a escribirse a mediados de 2017, cuando compañeros en común del colegio los presentaron y, desde aquel primer encuentro, emprendieron un camino de complicidad y sueños compartidos que culminó con su unión matrimonial.
Nos conocimos cuando yo cursaba la prepa, salimos por tres meses y luego nos hicimos novios formalmente; a partir de ese día, él se convirtió en mi mejor amigo, mi equipo y con quien mejor me la paso”.
Después de siete años de relación, Diego Bernardi dio el siguiente paso y le entregó el anillo a Gabriela Uribe en una terraza privada, la cual decoró personalmente con fotografías de momentos significativos, flores y un picnic romántico.
Estaba un poco nervioso, pero, sobre todo, emocionado, porque, desde que estoy con ella, hemos conectado de una manera muy especial. No tenía dudas de que Gaby era la persona con quien quería pasar el resto de mi vida".
Con la emoción a flor de piel, Gabriela Uribe y Diego Bernardi conmemoraron su enlace religioso en la Parroquia de Nuestra Señora de Lourdes, donde el Padre César Her nández, L.C., ofició la ceremonia en la que los bendijo como marido y mujer.
La fiesta nupcial reunió a 500 invitados en una hacienda de la Colonia Polanco, lugar en el que familiares y amigos acompañaron a los recién casados para festejar este nuevo capítulo en sus vidas.
Durante la velada, uno de los highlights fue cuando la novia y su papá, Patricio Uribe, bailaron al ritmo de “Tu Sangre en mi Cuerpo”, de Pepe y Ángela Aguilar, reflejando el profundo cariño y cercanía entre ambos.
El punto cumbre de la noche sucedió con la primera pieza de los ahora esposos, Gabriela Uribe y Diego Bernardi, quienes, al compás de “Something I Need”, de OneRepublic, compartieron un vals bajo la lluvia de pirotecnia, mientras sus allegados se sumaron a la pista para celebrar junto a ellos.
Magia en cada rincón
+ El venue de ambiente colonial destacó gracias a su decoración en tonalidades blancas, realzada con luces cálidas y bouquets verdes, los cuales fueron cuidadosamente diseñados por la florista Mary Leyla. Además, el DJ Vicente Lerdo de Tejada se encargó de poner el ambiente.
+ La novia optó por un vestido de brocado con tirantes que complementó con una gargantilla y aretes largos. Mientras que, para el ramo, eligió flores blancas y amarillas.
