
Debido a la pandemia y el lamentable fallecimiento de su abuelo paterno, don Chucho, Jesús Arroyo había perdido el entusiasmo por las grandes celebraciones de cumpleaños que solían ser una tradición dentro de su familia restaurantera.
Sin embargo, para honrar sus 28 años, Jesús Arroyo rompió con esa pausa y organizó una reunión en un rooftop de la Colonia Roma, donde compartió una velada especial con algunas de las personas más significativas en su vida.

“Mi abue tenía el afán de hacer una comida anual, en la que no podías contar el número de gente que había. Hoy, quise retomar esa costumbre, pero haciéndola de una manera diferente y desde una perspectiva más cercana”, comentó el festejado Jesús Arroyo.
“Fue una de las mejores decisiones que pude tomar, pues junté a amigos, familiares y conocidos con los que he atravesado por distintas etapas y han sido parte importante en mi camino”.
Espero que estos 28 sean sólo el inicio de muchos años más llenos de cosas buenas”.
JESÚS ARROYO, cumpleañero

Alrededor de 50 invitados acompañaron a Jesús Arroyo en un spot de ambiente relajado, el cual fue decorado con globos metálicos, espejos y juegos de luces brillantes. Entre música versátil, comida y drinks de distintos sabores, algunos de los presentes aprovecharon la ocasión para expresar su cariño hacia el anfitrión.
“Lo quiero porque es una persona muy noble; además, es un excelente vendedor, negociador y tiene un carisma excepcional”, mencionó su prima, Fernanda Reyes, “basta con darse cuenta de que logró reunir en un mismo lugar a personas de todas las edades y ámbitos, y todos aquí lo consideramos un gran amigo”.
Ojalá que esta vuelta al sol supere a la anterior; le deseo lo mejor, hoy y siempre”.
FERNANDA REYES, prima del festejado

+ Durante su fiesta, el instante que Jesús recuerda con más ilusión fue la hora de partir el pastel, cuando sus allegados le cantaron ‘Las Mañanitas’ mientras una luz de bengala iluminaba su rostro.
A parte de los obsequios y detalles materiales, para Jesús Arroyo, el mejor regalo de la noche fue estar rodeado de su gente querida, quien, con su muestra de afecto y palabras de aliento, hizo de su fiesta un recuerdo inolvidable para él.
“Le deseo muchas bendiciones, que siempre tenga esa habilidad para salir adelante, ser el mejor y seguir luchando por sus sueños. Todo lo que ha logrado ha sido por su propio esfuerzo, y estoy muy orgullosa de él”, destacó su mamá, Analia Reyes.
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