El Presidente Donald Trump ha enviado en los últimos días a miles de miembros de la Guardia Nacional y a 700 infantes de marina en servicio activo para sofocar las protestas en el área de Los Ángeles contra las acciones de control migratorio, a pesar de las objeciones del Gobernador demócrata Gavin Newsom y de líderes locales.
El martes, las tropas de la Guardia Nacional custodiaban a los agentes mientras realizaban arrestos, una ampliación de sus funciones con respecto a su rol anterior de proteger propiedades federales.
Estas acciones están en línea con lo que Trump prometió durante la campaña del año pasado, cuando como candidato aseguró que impulsaría el mayor esfuerzo de deportación masiva que haya visto Estados Unidos, y afirmó que estaría dispuesto a usar el poder militar para lograrlo.
Sin embargo, Trump ha cambiado su postura desde su candidatura presidencial de 2020, especialmente en lo relacionado con el uso de la Ley de Insurrección para enviar unidades militares en respuesta a disturbios dentro de los estados.
A continuación, un repaso de cómo Trump ha hablado sobre el uso del ejército en cuestiones migratorias —y cómo ha evolucionado su postura— en sus propias palabras:
2025
“Si hay una insurrección, sin duda la invocaré”
“Si hay una insurrección, sin duda la invocaría. Ya veremos. Pero les puedo decir que anoche fue terrible, y la noche anterior también”.
— Trump, martes, a los periodistas en el Despacho Oval.
Durante un encuentro con periodistas en la Oficina Oval, Trump dejó abierta la posibilidad de invocar uno de los poderes de emergencia más extremos a disposición de un presidente estadounidense.
La Ley de Insurrección autoriza al Presidente a desplegar fuerzas militares dentro de los Estados Unidos para reprimir la rebelión o la violencia doméstica o para hacer cumplir la ley en determinadas situaciones.
A menudo se la denomina “Ley de Insurrección de 1807”, pero en realidad es una amalgama de diferentes estatutos promulgados por el Congreso entre 1792 y 1871.
Al convocar a las fuerzas de la Guardia Nacional a pesar de las objeciones de Newsom, Trump citó una disposición legal que le permite movilizar a miembros del servicio federal cuando hay “una rebelión o peligro de rebelión contra la autoridad del Gobierno de los Estados Unidos”.
2024
“No tendría ningún problema en recurrir al ejército”
“Si pensara que la situación se está descontrolando, no tendría ningún problema en usar las fuerzas armadas, por así decirlo. Necesitamos seguridad en nuestro país. Necesitamos ley y orden en nuestro país. Y lo que sea que nos lleve a ello, pero creo que la Guardia Nacional cumplirá su función”.
— Trump, 30 de abril de 2024, entrevista con la revista Time.
Durante la campaña de 2024, Trump afirmó que utilizaría la Guardia Nacional para deportar a millones de migrantes en todo el país. No especificó cómo llevaría a cabo las operaciones ni qué papel desempeñaría la Guardia Nacional, pero añadió que recurriría al ejército si la situación se descontrolaba.
Cuando se le pidió que aclarara si usaría a las fuerzas armadas en el interior, dijo: “No creo que tenga que hacerlo. Creo que la Guardia Nacional podría hacerlo. Si no pudieran, entonces usaría a las fuerzas armadas”.
Trump declaró a Time que deportaría entre 15 y 20 millones de personas que se encuentran en el país sin documentos. Se estima que la población nacida en el extranjero, incluyendo a los migrantes que se encuentran en el país tanto legal como ilegalmente, ascendió a 46.2 millones, o casi el 14 por ciento del total de Estados Unidos, en 2022, según la Oficina del Censo, que también reportó unos 11 millones de inmigrantes que se encuentran en el país sin documentos.
Después de ganar las elecciones de noviembre, los posibles contornos de la administración entrante de Trump y cómo manejaría los temas, incluida la migración, comenzaron a tomar mayor forma.
El 17 de noviembre, después de que el activista conservador Tom Fitton proclamara en una publicación en redes sociales que el Presidente entrante “declarará una emergencia nacional y utilizará recursos militares para revertir la invasión de Biden a través de un programa de deportación masiva”, Trump respondió: “¡CIERTO!”.
En su primer día de regreso al cargo, Trump presentó un plan para reforzar la seguridad en la frontera sur mediante una serie de órdenes ejecutivas que entraron en vigor poco después de su toma de posesión el 20 de enero. Trump ordenó al Gobierno, con la asistencia del Departamento de Defensa , “finalizar” la construcción del muro fronterizo y enviar tropas a la frontera. No especificó cuántos irían —dejando la decisión al Secretario de Defensa— ni cuál sería su función exacta.
Sus órdenes ejecutivas sugirieron que el ejército ayudaría al Departamento de Seguridad Nacional con “espacios de detención, transporte (incluyendo aeronaves) y otros servicios logísticos”. Trump ordenó al secretario de Defensa que elaborara un plan para “cerrar las fronteras” y repeler la “migración masiva ilegal”.
2020
“No hay motivos para” tomar decisiones de insurrección
“Tenemos que acatar las leyes. No podemos movernos con la Guardia Nacional. Puedo llamar a una insurrección, pero no hay razón para hacerlo jamás”.
—Trump, 15 de septiembre de 2020, en un foro abierto organizado por ABC News en Filadelfia.
Cuando se le preguntó durante un cabildo electoral de 2020 sobre su promesa de campaña de restablecer la ley y el orden, Trump dijo que no podía activar la Guardia Nacional a menos que un Gobernador lo solicitara, refiriéndose a la respuesta a los incendios forestales que devastaron Portland en 2020.
“Tenemos leyes. Tenemos que acatarlas. No podemos movilizar a la Guardia Nacional. Puedo llamar a una insurrección, pero no hay razón para hacerlo jamás”, dijo.
“Incluso en el caso de Portland, no podemos llamar a la Guardia Nacional a menos que nos lo solicite un Gobernador. Si un Gobernador o un Alcalde es demócrata, como en Portland, los llamamos constantemente”.
Esa referencia no era explícitamente a la inmigración, sino a la voluntad de Trump de anular la decisión del gobernador de un estado y federalizar los recursos de la Guardia Nacional.