Si algo le cuesta trabajo a los californianos es lidiar con la presión y los golpes.
Boston necesita sacar su ADN ganador y jugar como nunca. Defender como perros y buscar todos los balones.
Jugadores como Marcus Smart, Al Horford y Jaylen Brown y Robert Williams deben robar balones y hacer que los locales pierdan posesiones.
Williams es un muro en la defensa, y urge que sume en el sexto duelo, al menos, tres bloqueos, mientras que Smart no debe permitirle nada a Curry, incluso, ser rudo con el guardia de Warriors.