SUS PROPIEDADES
El PRI posee tres inmuebles valuados en:

Creado hace 95 años, la sede nacional del PRI, ubicada en Insurgentes Norte 59, es la más costosa, pues está valuada en 320 millones 393 mil 88 pesos.
El monumental edificio, que mide 8 mil 68 metros cuadrados, se compró el 12 de julio de 1963, pero fue inaugurado por Gustavo Díaz Ordaz el 20 de noviembre de 1964, como candidato presidencial.
Ahí laboran los cientos de empleados que conforman la estructura priista.

Otro de sus inmuebles, ubicado en la Fragua 3, Colonia Tabacalera, sigue en la incertidumbre, pues por los daños provocados por el sismo del 2017 se encuentra abandonado.
Éste edificio albergaba a la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP), la cual tuvo que trasladarse a la sede nacional.
De acuerdo con el partido, el inmueble, que se terminó de pagar el 23 de febrero del 2001, está valuado en 51 millones 79 mil 322 pesos.
En junio del 2019, el Consejo Político aprobó que éste se diera en hipoteca para conseguir un crédito bancario. Incluso en el 2021 se aseguró que dicho plan se había concretado.

Por ese rumbo tiene otro inmueble, en Ezequiel Montes 99, es más pequeño y está asignado al Movimiento Territorial, y el partido reporta que vale 10 millones 689 mil 264 pesos.
SUFRIRÁ GOLPE EN SUS FINANZAS

Reducir un 8 por ciento en su votación, tendrá un costo financiero para el PRI.
En el 2021, el partido obtuvo el 19 por ciento de la votación nacional, por lo que en los años siguientes su presupuesto estuvo basado en ese porcentaje respecto a la bolsa nacional de prerrogativas.
En el 2024, alcanzó mil 201 millones 628 mil 530 pesos para sus actividades ordinarias.
Aunque seguirá siendo la tercera fuerza política, al obtener el 11 por ciento de votación a diputados, pero debido al crecimiento de los partidos que integran la 4T, tendrá un descalabro de alrededor de 312 millones de pesos.
Así, para el 2025 se prevé que obtenga, sólo para actividades ordinarias, poco más de 888 millones pesos.

En la última década, las cuotas de militantes que recibe el tricolor también han tenido un impacto.
Su Reglamento del Sistema Nacional de Cuotas establece que los ‘militantes colaboradores’, es decir, sus empleados, así como los dirigentes, deberán entregarle al partido el 3 por ciento de sus ingresos mensuales.
Mientras que sus militantes podrán dar aportaciones voluntarias que no rebasen el 0.5 por ciento anual del tope de gasto para la elección presidencial anterior. Es decir, 3.3 millones.
Al disminuir de posiciones a nivel nacional, estatal y municipal, las aportaciones de sus cuadros se fue en picada.
De acuerdo con los informes que el partido entrega al INE, en el 2016 –año en el que el organismo comenzó el registro de aportaciones- recibió en cuotas de militantes priistas 70 millones 849 mil 262 pesos.
Un año después, apenas reportó 15 millones 45 mil pesos, y en lo que va del 2024 afirma haber recibido 7 millones 722 mil pesos.
Sin embargo, en el 2023, el INE únicamente desglosa el monto de una treintena de militantes por 164 mil pesos, y 376 mil de simpatizantes.
¿MANTENDRÁ RITMO DE GASTO?

Tras el fracaso electoral del 2018, donde perdieron la Presidencia y lugares en el Congreso, el PRI obtuvo menos prerrogativas los siguientes tres años, entre 770 y 856 millones de pesos para el gasto ordinario.
Sin embargo, con la llegada de Alejandro Moreno a la dirigencia del partido, en agosto del 2019, se incrementó su mantenimiento cotidiano, principalmente en la nómina.
Por ejemplo, en el 2018, la dirigencia destinó al pago de sus “dirigentes”, 11 millones 318 mil pesos, y a los sueldos del resto de sus empleados 266 mil 604 mil pesos.
El 2019 cerró con el pago de líderes en 27 millones 459 mil pesos, y para el resto de la nómina 327 millones 392 mil.
Esos montos bajaron en el 2021, tras la baja de presupuesto, por lo que en el 2023 destinó al pago de dirigentes 14 millones 510 mil 696 pesos, pero en sueldos de empleados se mantuvo casi igual, con 323 millones 35 mil pesos.
Ahora, con una reducción en sus prerrogativas, el PRI deberá valorar si mantiene ese ritmo de gasto.
Su gasto anual en servicios generales también subió en el 2023, al ubicarse en 456 millones 609 mil 597 pesos, luego de que en años anteriores estaba en alrededor de 300 millones.
¿Y LAS DEUDAS?

De acuerdo con el último Informe Anual sobre el Origen y Destino de los Recursos de los Partidos, publicado por el INE, el PRI cerró el 2023 con una deuda de 189 millones 500 mil pesos de un crédito bancario a largo plazo.
También reportó que debía en impuestos 65 millones 654 mil 362 pesos y a proveedores 123 millones 429 mil 335 pesos.
En las modificaciones a los estatutos, permiten que la Comisión de Financiamiento del partido, encabezada por el dirigente nacional, pueda endeudarse hasta un año sin que la decisión sea resuelta por el Consejo Político.
Esto, afirman, permitirá a la Secretaría de Finanzas y Administración del CEN garantizar el flujo de dinero y cubrir los compromisos sobre gastos operativos, financiar actividades urgentes o responder a contingencias que requieran de recursos adicionales en el corto plazo.
“La Comisión de Financiamiento aprobará y verificará (…) las deudas a un plazo mayor de un año, que superen una cantidad del 20 por ciento del monto de financiamiento público federal previsto para ese año”, indica la reforma, que aún debe ser avalada por el INE.
Se hace la aclaración que estas nuevas facultades no implican “comprometer el patrimonio del partido”.