JOYA DE LOS BALCANES

Sofía, la capital de Bulgaria, es una gema que fusiona la riqueza histórica europea con una atmósfera cosmopolita. Ubicada a los pies del Monte Vitosha, esta urbe invita a descubrir su encanto a través de calles adoquinadas, donde lo antiguo y lo moderno coexisten armoniosamente. Desde las ruinas romanas hasta los bulliciosos cafés contemporáneos, la ciudad es un crisol de culturas.

Uno de sus emblemas es la Catedral Alexander Nevski, con su imponente cúpula dorada que destaca en el horizonte. A pocos kilómetros, la iglesia medieval de Boyana, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, conserva impresionantes frescos. El arte y la cultura búlgaros también se reflejan en el Museo Nacional de Historia, mientras que el Palacio Nacional de la Cultura es el epicentro de eventos que demuestran la energía creativa de la capital.

Además de su riqueza cultural, Sofía ofrece experiencias gastronómicas únicas, desde la tradicional banitsa, hasta el afamado yogurt búlgaro. Para los amantes de la naturaleza, una caminata en el monte Vitosha es imprescindible, ya que combina la aventura con vistas panorámicas de la ciudad.

HISTORIA VIVA EN TURQUÍA

En el corazón de Estambul, Santa Sofía, conocida también como Hagia Sophia, se erige como un testimonio arquitectónico que ha sobrevivido a los embates del tiempo. Inicialmente construida como catedral bajo el mandato del emperador bizantino Justiniano I en el año 537, fue la iglesia más grande del mundo cristiano durante mucho tiempo. Su cúpula, que desafía la gravedad, sigue asombrando a los visitantes con su ingeniería.

Tras la conquista otomana de Constantinopla de 1453, Santa Sofía fue convertida en mezquita, acogiendo rezos musulmanes durante casi 500 años. Hoy, como museo, Santa Sofía es un crisol de culturas, donde los visitantes pueden admirar mosaicos bizantinos resplandecientes junto a inscripciones islámicas.

La mezcla de arte sacro de diferentes religiones y épocas bajo un mismo techo es un testimonio único del diálogo entre civilizaciones. Además, se considera como una cápsula del tiempo ya que ha sobrevivido terremotos y conquistas consolidándose como ícono arquitectónico mundial.

UN TESORO EN LA PROVINCIA DE QUEBEC

En el corazón de la región de Laurentides, en Quebec, Sainte-Sophie se presenta como un oasis de paz rodeado de naturaleza. Este pequeño pueblo canadiense, con sus bosques y lagos serenos, es el destino ideal para quienes buscan desconectar y disfrutar de actividades al aire libre. Durante el verano, sus senderos invitan a caminatas y paseos en bicicleta, mientras que en invierno, el paisaje nevado es perfecto para el esquí de fondo y las caminatas con raquetas.

Además de su entorno natural, Sainte-Sophie destaca por su rica historia y cultura local. Los mercados, festivales y eventos comunitarios permiten a los visitantes sumergirse en la vida de Laurentides. A tan solo un corto viaje desde Montreal, es un destino accesible que ofrece una verdadera desconexión y una experiencia auténtica para todo tipo de viajeros, ya sea en busca de aventuras o de tranquilidad en medio de la naturaleza.

UN IMPERDIBLE

Ubicado en Madrid, España, el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS), conocido comúnmente como Museo Reina Sofía, es un recinto donde se le rinde homenaje al arte contemporáneo y del siglo 20. Tomó como sede el antiguo Hospital General de Madrid, gran edificio neoclásico del siglo 18, está ubicado en la zona de Atocha y forma parte del llamado Triángulo del Arte de Madrid, que incluye a otros dos célebres museos: el Prado y el Thyssen-Bornemisza.

En la colección permanente del museo destacan obras de grandes artistas españoles del siglo 20, en especial de Pablo Picasso, Salvador Dalí y Joan Miró.

Información: Argelia Maupomé

Edición: Patricia Miranda

Diseño: Rodolfo G. Zubieta

Fotos: de los portales web y redes sociales de cada lugar, Come Explore Canada, TripAdvisor

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