El diario The New York Times informó en septiembre de 2024 que la base militar de Guantánamo también había sido utilizada por décadas por Estados Unidos para detener a migrantes interceptados en el mar, pero en un área separada de la usada para albergar a los acusados de terrorismo.
Un número relativamente pequeño de migrantes ha sido enviado a esas instalaciones. Según el periódico, solo 37 fueron retenidos allí de 2020 a 2023, pero esta cifra puede subir drásticamente tras el anuncio de Trump.
En su segundo mandato, el magnate republicano ha puesto en marcha lo que considera una ofensiva contra la migración ilegal, con redadas, arrestos y deportaciones en aviones militares.