Fuerte, atlético, devoto de la fe católica y con la voluntad de ayudar a otros, es como los seres queridos de Olegario Vázquez Raña lo honran, luego de su sensible fallecimiento.
Nació en la Ciudad de México el 10 de diciembre de 1935. Fue hijo de Venancio Vázquez y María Raña; creció en la Colonia Guerrero, donde junto a su hermanos, Mario, (q.e.p.d.), Aurelio, Sara, Apolinar y Abel, heredó el emprendimiento de muebles de su papá.
Don Olegario Vázquez Raña consideraba a la familia como uno de los pilares más importantes, por eso, en 1968 formó la suya al lado de María de los Ángeles Aldir, con quien procreó a sus tres hijos, Mónica, Olegario y María de los Ángeles.
De igual forma, Olegario Vázquez Raña fue un hombre que no olvidó sus orígenes, pues con frecuencia viajaba a Avión, en Galicia, España, lugar de donde provenían sus padres.
En el destino, disfrutaba de jugar dominó con sus colegas Carlos Slim Helú, Javier Santoveña, José Collazo, Alejandro Blanco y el Cardenal Norberto Rivera, entre otros.
En 1998, Olegario Vázquez Raña fundó el Grupo Empresarial Ángeles, enfocado en cuatro sectores: turismo, servicios médicos, comunicaciones y finanzas.
Sin embargo, en 2024 cambió el nombre de la entidad a Grupo Vazol, e integró los campos de la farmacéutica y ciencias de la salud a su compañía.
No obstante, la historia de don Olegario Vázquez Raña no se limitó sólo a los negocios, ya que representó al País en los Juegos Olímpicos de Tokio 1964, México 1968, Múnich 1972 y Montreal 1976. Asimismo, impulsó la disciplina que le apasionaba encabezando la Federación Internacional de Tiro de 1980 a 2018.
En 1992, Olegario Vázquez Raña fue nombrado presidente honorario vitalicio de la Federación Mexicana de Tiro, y de la Asociación de Olímpicos Mexicanos, en 2023, año en el que también recibió el distintivo OLY; mientras que en 1975, lo galardonaron con el Premio Nacional del Deporte.
Rindo tributo a la persona que nos enseñó que la familia es lo más importante y la amistad es para siempre”.
Olegario Vázquez Raña fue laureado con 18 medallas que consiguió en certámenes como los Juegos Centroamericanos y del Caribe, Panamericanos, así como Copas del Mundo, y dejó testimonio de su experiencia como atleta en su autobiografía “Mi Vida en el Deporte”.
Otras de sus aficiones eran el tenis, el cual jugó previo a su carrera como tirador, y la Fórmula 1, debido a que asistía de manera regular a las ediciones del Gran Premio de México, junto a Slim Helú.
En el ámbito altruista, Olegario Vázquez Raña mostró su voluntad abnegada al presidir la Cruz Roja Mexicana, el
Consejo Ciudadano de Procuración de Justicia y el Patronato de la Academia Nacional de México, en los que promovió donaciones médicas, becas, campañas y acciones de asistencia humanitaria.
Un aspecto destacable, es su contribución a la educación de los alumnos de la Universidad Anáhuac México a través de las cátedras “Hospital Ángeles” y “Grupo Imagen”, en los campus Norte y Sur de la institución.
No son suficientes las palabras ni los sentimientos para despedir a un gran amigo y querido compañero de vida: Olegario Vázquez Raña. Descanse en paz”.
Tras su muerte, asociaciones como la Fundación Miguel Alemán, A.C., Shriners Children’s, Teletón, de la que fue miembro, y la Fundación Carlos Slim, reconocieron el trabajo humanitario de don Olegario Vázquez Raña y reafirmaron su vínculo con él.
Así, el hombre de negocios dejó un legado de perseverancia y generosidad en sus seres queridos y conocidos, que lo describen como un arquitecto del progreso y un individuo comprometido como el desarrollo social de la Nación.
Fue un ejemplo constante de disciplina, entrega, carácter y también de nobleza”.
Siempre entendió que el verdadero éxito no se mide únicamente con cifras, sino en el impacto positivo que una empresa puede tener en la vida de las personas y en la sociedad”.
Conviven Slim y Vázquez Raña en España
Mi abuelo fue récord olímpico en la disciplina de crear una familia unida y medalla de oro en hacer una empresa exitosa”.
Lamento profundamente el sensible deceso de don Olegario Vázquez Raña, y envío mis condolencias a su familia y amigos, a quienes deseo pronta resignación. Que en paz descanse”.
Deja un gran legado en su familia y el movimiento olímpico internacional”.