Admiro su entrega total a lo que hace, su visión para anticiparse y su capacidad para levantarse con más fuerza cada vez que se cae. Tiene un equilibrio admirable entre su carácter fuerte y su lado familiar, que es donde realmente se transforma. Lo admiro porque construye, impulsa y no se cansa de avanzar, y porque lo hace con pasión y corazón”.
Lo que más disfruté fue la presencia de mi familia y de la gente que quiero. Reunir a personas que han sido clave en distintos momentos de mi vida, verlos disfrutar, reír, bailar conmigo… eso es lo que le dio sentido a todo”.
Para Fernando Castellanos Cal y Mayor, cumplir 39 años representa una edad simbólica, de cierre y preparación, pues se encuentra más que listo para entrar a los 40 con experiencia, visión y mucha determinación.
“Estoy en mi mejor momento. Me siento fuerte, enfocado y, sobre todo, preparado para asumir con madurez cualquier tipo de responsabilidad: laboral, política o personal. Hoy disfruto con más conciencia de lo que tengo, lo que represento y hacia dónde quiero ir”, comentó el regidor en el Estado de México, Fernando Castellanos Cal y Mayor.
Sus retos antes de llegar al cuarto piso son consolidar lo que ha construido con esfuerzo en sus diferentes facetas: en lo público, el posicionamiento de su despacho y, lo más importante, seguir siendo un padre presente en la vida de sus cuatro hijos, así como un esposo comprometido, pues afirma que el éxito no tiene sentido si no va de la mano con la plenitud familiar.
Para festejar esta nueva vuelta al sol, el originario de Chiapas, donde se desempeñó como Alcalde de Tuxtla Gutiérrez, organizó una reunión al estilo “Tropical Habana”.
“La vida se celebra y quise hacerlo a lo grande, con un concepto distinto, alegre, que me representara: sabor, ritmo, emoción y convivencia real. Fue una forma de agradecer por todo lo vivido y recargar energía para lo que viene”, agregó Fernando Castellanos Cal y Mayor, director de un despacho enfocado en derecho disciplinario, cumplimiento normativo y auditorías externas para Estados y municipios.
Como amigo, Fernando es entregado, espléndido, una persona que siempre ve por ti y por sus queridos ; tiene una capacidad de dar cariño y amor inigualable. Siempre te sacará una pequeña o gran risa en cualquier momento”.
Durante la conmemoración, la esposa de Fernando Castellanos Cal y Mayor, Martha Muñoz, no perdió la oportunidad de resaltar sus cualidades y desearle lo mejor en esta nueva etapa.
“Fernando es un hombre con una energía única. Apasionado, firme en sus convicciones, intenso en sus emociones y profundamente comprometido con su gente. Es protector, generoso y, sobre todo, un padre dedicado. Tiene la capacidad de inspirar y mover a quienes lo rodean. Es un líder nato, pero también un ser humano cercano, con una sensibilidad que se refleja en su amor por la familia”, confesó la pareja del cumpleañero.
Le deseo a Fer que la vida lo llene de aventuras y que Dios le conceda los anhelos de su corazón y que este año le traiga todo lo que desea”.
“Admiro su fuerza, visión y la entrega con la que vive cada etapa de su vida. Es un hombre apasionado y con un enorme sentido de responsabilidad. Juntos sostenemos un gran amor que se refleja en nuestros cuatro hijos, que son el motor de nuestro mundo. Me involucro, lo apoyo e impulso en muchos de sus proyectos públicos y privados, porque creo en él, en lo que representa y en todo lo que todavía le falta por lograr”.
Fue así que los seres queridos de Fernando Castellanos Cal y Mayor se embarcaron en un auténtico viaje por los sabores caribeños y coctelería que los transportó directamente a los aromas, colores y ritmos de la isla.
“Lo que más disfruté fue haber visto la gran decoración temática que le preparó Martha, su esposa, y ver cómo Fernando recibía abrazos y elogios. También, a los invitados deleitarse con los bocadillos sin saber cuál les había gustado mas, así como la gran coctelería: el éxito fue el mojito”, comentó Claudio Ibarrola, amigo del anfitrión.
“Le deseo mucha dicha, gran felicidad en el camino junto a su pareja y a sus hijos, que nunca deje de sonreír y siga siendo esa persona carismática, amena, agradable y que abre siempre la puerta de su casa”.
