Invito a más personas a involucrarse en alguna causa social, la que gusten, y a quienes ya están apoyando, les agradezco infinitamente”,
Sin duda, el motor más importante de esta comunidad es la generosidad de todos los presentes, ya sea en tiempo, talento o recursos”.
A fin de agradecer a quienes, con su solidaridad y compromiso, hacen posible el impacto positivo de Fundación Becar, I.A.P., miembros de esta institución filantrópica realizaron una comida en conmemoración de 25 años de trabajo continuo en favor de la educación integral de las infancias.
“Estas dos décadas y media están hechas de donantes y aliados que han abierto oportunidades, encendido esperanzas y transformado vidas”, comentó Regina García, directora general de Fundación Becar, I.A.P., “hoy, honramos a todas las personas cuya ayuda permite a miles de niños en situación vulnerable acceder a una formación de calidad”.
Celebrar 25 años no es simplemente un aniversario, es festejar a jóvenes graduados y niños con sueños hechos realidad”.
La celebración, realizada en un rooftop de la Ciudad, reunió a empresarios, filántropos y representantes de organizaciones afiliadas, lo cual propició un espacio de convivencia y fortalecimiento de lazos en torno a una causa común.
“Como muchos saben, mi proyecto de vida ha sido impulsar la educación en la Nación, por ello, es fascinante coincidir en este evento con gente que comparte ese mismo ímpetu social”, dijo Lorena Ochoa, embajadora y miembro del comité de procuración de Fundación Becar, I.A.P..
Previo al banquete, hubo una ceremonia de entrega de reconocimientos a los presentes, quienes recibieron un diploma como símbolo de valoración por su respaldo constante en la provisión de recursos, becas, licencias y programas de capacitación.
Por otra parte, algunos asistentes compartieron reflexiones sobre aquello que los inspira a involucrarse en este proyecto de Fundación Becar, I.A.P., con el deseo de motivar a más personas a unirse y ser parte del cambio.
“En vez de quejarnos sobre lo malo de México, deberíamos preguntarnos ‘¿Qué estoy haciendo yo para construir el País en el que quiero vivir?’. Se trata de pensar qué podemos aportar, en lugar de esperar a que otros lo hagan por nosotros”, expresó Paola Hirmas, patrona de la fundación desde 2013.
Directivos e integrantes de varias fundaciones, así como empresas de distintos ámbitos recibieron un diploma como símbolo de valoración por su respaldo constante en la provisión de recursos.
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