
La disciplina requerida para ser, de forma simultánea, educando y deportista rinde frutos con beneficios personales, académicos y profesionales, concuerdan especialistas.
“(Algunos) tienen la idea de que, como son estudiantes, o estudian o entrenan y no, (ambas actividades) van de la mano”, resalta Blanca Suárez, jefa del Departamento de Cultura Física y Deportiva del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
Mover el cuerpo, explica la maestra en Ciencias del Deporte, facilita la circulación de la sangre y la oxigenación de las células. Además, combate el sedentarismo típico entre los jóvenes que pasan horas sentados en clases o al elaborar tareas.
A quienes buscan practicar una disciplina deportiva a un nivel competitivo o de alto rendimiento, las universidades suelen brindarles facilidades para que no descuiden su avance escolar, cuenta Alfredo Solís, coordinador de Deportes de la Universidad Anáhuac Mayab.
Implica un doble esfuerzo por el tiempo dedicado para alcanzar el máximo peldaño como atleta a la par de sobrellevar los estudios, pero es factible, precisa.
“El chico que practica deporte ya está acostumbrado a una exigencia y a una disciplina. Eso se ve reflejado luego en lo académico”, destaca, “el deporte lo vemos como un trampolín para llegar al éxito profesional”.
Realizar este tipo de actividades, ahonda Solís, abre puertas a becas deportivas en instituciones nacionales e internacionales, así como a la posibilidad de viajar a otras ciudades, tanto en el territorio nacional como en el extranjero, para representar al alma mater o al País en competencias.
Cuando llega el momento de incorporarse al mundo laboral, la experiencia atlética de los jóvenes suele ser valorada por los empleadores e incluso puede ayudarles a mejorar sus posibilidades de obtener el puesto que desean, comparte Nelson Gómez, director en México de la plataforma de búsqueda de empleo Indeed.
“Al ver que un candidato participó en diversas actividades extracurriculares, como deportes, se pueden esperar ciertas cualidades, entre ellas perseverancia y colaboración. Ambas son habilidades valiosas en una empresa”, indica.
Ventajas escolares

Cualquier estudiante debería afianzar el hábito de practicar alguna actividad física por sus beneficios para la salud física y mental, además de desembocar en un mejor rendimiento académico, platica Suárez.
“El ejercicio físico desencadena procesos que facilitan la neuroplasticidad del cerebro. ¿Qué quiere decir esto? Que nos genera una mayor facilidad para aprender y genera una mejor memoria”, enfatiza.
La actividad física también estimula la producción de neurotransmisores, como dopamina y serotonina, que influyen en la motivación y el estado de ánimo, añade la Anáhuac Mayab.
Adicionalmente, los asiduos a practicarla afinan su capacidad de planificar y establecer prioridades académicas, saben cómo gestionar la presión (algo muy útil durante los períodos de exámenes, por ejemplo), son capaces de regular sus emociones y pueden concentrarse durante largas jornadas de estudio gracias a su incrementada resistencia física y mental.
“Quienes hacen deporte se mantienen sanos. Cuando lo hacen muy temprano, se les activa el día mucho más rápido y lo aprovechan para captar, de mejor manera, lo que ven en un salón de clase”, detalla Solís, licenciado en Mercadotecnia por la Universidad del Mayab.
“Cuando se activa el cerebro por toda la adrenalina de un ejercicio previo, eso les ayuda a retener un poquito mejor (la información) y a estar más vivos en el ámbito académico”.

Fortalezas para la vida



Hacer deporte, ya sea de forma recreativa o en un programa de alto rendimiento, es una actividad que se recompensa con el desarrollo de habilidades, perspectivas y valores de provecho cotidiano, sostiene Suárez.
Los atletas estudiantiles cultivan la honestidad, el anhelo de superar sus propios límites y la generación de ideas para afrontar obstáculos, ejemplifica.
“Alumnos que compitieron están dando clases porque se prepararon, tomaron cursos y les gustó esa parte de enseñar la disciplina que aprendieron”, comenta la entrenadora, “el deporte es una forma de vida (…) y lo transmites a otras generaciones”.
Al practicarlo se disminuyen los niveles de cortisol (conocida como la hormona del estrés), se afianza la confianza en uno mismo, la comunicación, la resiliencia para hacer frente a la frustración y el trabajo colaborativo y en equipo, apunta la Anáhuac Mayab.
Otros beneficios son el fomento de destrezas sociales y la mejora en la calidad del sueño, pues llevar a cabo entrenamientos favorece un descanso reparador. También se realiza networking: ser parte de un grupo deportivo facilita las interacciones y la creación de lazos de amistad, agrega la institución.
“(Haber practicado deportes) demuestra la capacidad del candidato para trabajar con otros, encontrar soluciones rápidamente y una mejor tolerancia a situaciones de estrés”, establece Gómez de Indeed.

Impulso laboral



Sortear situaciones de alta presión, como participar en certámenes y cumplir con múltiples responsabilidades, permite a los deportistas generar capacidades de valor para los reclutadores, afirma Gómez.
“Desarrollan habilidades como gestión del tiempo, adaptabilidad, mejor comunicación y capacidad de rendir bajo presión”, detalla, “también manejan agendas ocupadas, lo que demuestra que saben organizar su tiempo de manera efectiva y que valoran el equilibrio entre la vida profesional y personal”.
Gómez aconseja incluir la trayectoria deportiva como experiencia en el currículum vitae (CV) si se tiene o se tuvo un puesto de liderazgo, como ser capitán o entrenador.
Ser parte de un equipo, o haber estado, puede incluirse en el área de habilidades o perfil personal (“sobre mí”), agrega, pues los reclutadores suelen apreciar las actividades, más allá de la esfera laboral, que incentivan el bienestar y crecimiento personal.
Solís, por otra parte, acentúa que los deportistas tienden a ser líderes natos, pues en las canchas y en las aulas llegan a labrar su autoestima y seguridad.
“(El empleador) sabe que tiene un diamante en bruto para su empresa porque ya trae ciertas habilidades que de repente no se ven, como la disciplina, el trabajo en equipo, el esfuerzo y, sobre todo, el sentido de pertenencia, algo que muchos deportistas tienen”, señala el coordinador deportivo.

¿Alto rendimiento o recreación?
Suárez y Solís marcan las diferencias entre ambas formas de practicar deporte.
- Los deportistas de alto rendimiento entrenan diariamente, de tres a cinco horas, con un elevado nivel de exigencia. Cuentan con metas y objetivos claros, como ganar competencias o mejorar sus marcas personales.
- Quienes recurren al deporte por gusto suelen practicarlo dos o tres días a la semana, por máximo dos horas diarias, a niveles bajos o moderados de exigencia. Buscan mantenerse activos y sólo disfrutar los encuentros.
Juegos universitarios
México cuenta con dos eventos deportivos para atletas de educación superior.
Universiada Nacional
Convocada por el Consejo Nacional del Deporte de la Educación (CONDDE), consta de competencias en 34 disciplinas con miras a seleccionar representantes de México en los Juegos Mundiales Universitarios.
Campeonatos Nacionales Universitarios
Creados por la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), son una nueva plataforma para el desarrollo del deporte a nivel superior en 32 disciplinas.
Carreras afines
Las opciones de formación universitaria son variadas en este campo.
Administración del Deporte
▪️ Impartida en: Anáhuac México y UACH.
▪️ Enfocada en gestionar negocios y ofertar productos y servicios deportivos y de cultura física.
Ciencias del Deporte
▪️ Impartida en: La Salle México y UANL.
▪️ Se enseña cómo planear, diseñar y gestionar programas de intervención de la cultura físico-deportiva.
Educación Física
▪️ Impartida en: ESEF y UAEM.
▪️ Busca propiciar el desarrollo de estudiantes mediante actividades deportivas, motrices y recreativas.
Entrenamiento Deportivo
▪️ Impartida en: ENED y U. de Londres.
▪️ Para saber cómo fomentar el bienestar físico y rendimiento de las personas con fundamentos científicos.
Marketing Deportivo
▪️ Impartida en: UFD y UVM.
▪️ Dirigida a la creación, promoción y comercialización de eventos deportivos, marcas y talentos.
Vida universitaria
Los servicios deportivos, culturales, artísticos, sociales y de bienestar complementan el apartado académico de estudiar una licenciatura. Su calidad puede determinarse a través del grado de satisfacción en indicadores específicos, entre ellos:
- Actividades deportivas.
- Actividades recreativas.
- Diversidad.
- Entorno de clase.
- Programas y servicios internacionales.
- Recursos de ocio.
- Residencia.
- Servicios de biblioteca.
- Tecnologías de la información.
- Transporte y estacionamiento.
¿Cuál practicar?
Todo ejercicio impacta en la salud física, mental y emocional de las personas, y les permite estar en forma de una manera integral.
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Información: Tonatiúh Rubín.
Edición: Ana Gabriela Rezc.
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