Cada vez es más común que en los tribunales se defienda a la naturaleza, una tendencia que podría fortalecerse, según la ONU, gracias a la propuesta de convertir al ecocidio en el quinto delito que se juzga en la Corte Penal Internacional (CPI).
A finales de junio, un equipo internacional de 12 juristas presentó la definición de este crimen con el fin de promover su inclusión al Estatuto de Roma, instrumento que rige a la CPI y que México ratificó en 2005.
En caso de conseguirlo, se sumaría a los otros cuatro agravios que persigue este organismo: el genocidio, los crímenes de guerra, los de lesa humanidad y el crimen de agresión.
¿Qué es el ecocidio?
“Cualquier acto ilícito o arbitratio perpetrado a sabiendas de que existe una probabilidad sustancial de que cause daños graves que sean extensos o duraderos al medio ambiente”.
Definición del Panel de Expertos Independientes para la Definición Jurídica de Ecocidio.
Un largo camino
La Fundación Stop Ecocidio convocó al grupo de juristas, conocido como Panel de Expertos Independientes para la Definición Jurídica de Ecocidio, el año pasado para comenzar a redactar la definición.
Los trabajos se realizaron en el marco del 75 aniversario del comienzo de los juicios de Núremberg, en el que los nazis fueron juzgados por los crímenes que cometieron durante la Segunda Guerra Mundial. En aquella ocasión, se estrenaron los términos “genocidio” y “crímenes contra la humanidad”.
Por su parte, “ecocidio” fue utilizado por primera vez en 1970 por el biólogo Arthur Galston de Estados Unidos durante una conferencia acerca de la guerra.
En 1985, Benjamin Whitaker, entonces Relator Especial de las Naciones Unidas, abogó por incorporarlo a la definición de “genocicio”, pues consideraba que se trataba de alteraciones nocivas, a menudo irreparables, del medio ambiente ocasionadas deliberadamente o por negligencia culposa.
En la actualidad, no existe un marco legal para abordar el ecocidio a nivel internacional. Por lo tanto, no hay un sistema para responsabilizar a quienes toman las decisiones en las empresas y los gobiernos que causan daños y abusos al medio ambiente.
Sumar este delito al Estatuto de Roma permitiría llevar a juicio a quienes los perpetran ante la CPI o cualquier jurisdicción que ratifique la anexión.
“Reconocer el ecocidio como un crimen internacional es el enfoque más adecuado para luchar contra la impunidad de este crimen y sus autores”.
Dior Fall Sow
Co-presidenta del panel de expertos y ex fiscal de la ONU.
“Ha llegado el momento de utilizar el poder del derecho penal internacional para proteger nuestro medio ambiente mundial”.
Philippe Sands QC
Co-presidente del panel de expertos y profesor de University College London (UCL).
Algunos ejemplos son...
Deepwater Horizon
En 2010, explotó la plataforma Deepwater Horizon en el Golfo de México, lo que provocó un derrame de petróleo que se extendió por 149 mil kilómetros cuadrados.
Ojo de fuego
A principios de julio, una fuga en un gasoducto de Petróleos Mexicanos (Pemex) ocasionó un incendio en el Golfo de México. Según un comunicado de 24 organizaciones ambientalistas, el evento puede considerarse un ecocidio.
Chernóbil y Fukushima
En 1986, ocurrió un accidente nuclear en la central de Chernóbil, ubicada en Ucrania.
Por otro lado, en 2011 sucedió otro accidente en la central de Fukushima Daiichi en Japón.
Deforestación
En los últimos 30 años, se han perdido cerca de 420 millones de hectáreas de bosque por la conversión a diferentes usos de la tierra, según la FAO.
Algunas actividades vinculadas son la ganadería industrial, la extracción minera y la producción tanto de madera como de aceite de palma.
Contaminación
La contaminación de los océanos, de la tierra y del aire podrían considerarse como ecocidios relacionados a actividades como las emisiones de gases de efecto invernadero, la descarga de químicos en cuerpos de agua y la producción de plásticos.
¿Qué sigue?
Cualquier país que haya ratificado el Estatuto de Roma puede sugerir una modificación o enmienda. Se adopta una vez que dos terceras partes de los miembros de la CPI están a favor. Es decir, se requeriría el visto bueno de 82 de las 123 partes.
Según su legislación local, los países entonces pueden ratificar este cambio para su aplicación. Un año después de presentada la ratificación, la enmienda entraría en vigor en cada estado.
Incluso los países que no forman parte de la CPI, como China o Estados Unidos, o aquellos que no ratifiquen el cambio serán afectados, pues quienes sí lo hagan podrían arrestar a una persona no nacional por un ecocidio cometido en otro lugar.
Apoyan que sea crimen
Hasta ahora, algunos miembros de la CPI han expresado su interés por modificar el Estatuto de Roma, por ejemplo: Bélgica, Canadá, España, Finlandia, Francia y Luxemburgo.
Además, cerca de 40 personalidades del mundo del activismo, el arte, la ciencia y la política también han manifestado su deseo porque el ecocidio se convierta en un crimen internacional, apunta la Fundación Stop Ecocidio. Algunas de ellas son:
Fuentes: Corte Penal Internacional (CPI), Fundación Stop Ecocidio y Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).