Sin lugar a duda, la luz fue la protagonista de una velada y la razón por la que interioristas y arquitectos se reunieron en una casa con más de 100 años de historia en la Colonia Escandón.

“Estoy admirada, fascinada y muy agradecida de ser invitada a una noche tan especial, en la que vemos el arte en todas sus expresiones: desde las invitaciones con unos gráficos increíbles hasta la instalación espectacular con muestras y una vanguardia increíble”, expresó la diseñadora mexicana Sally Azar.


Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipiscing elit. Ut elit tellus, luctus nec ullamcorper mattis, pulvinar dapibus leo.

La mente creativa detrás de la tercera edición de Maison Diez Company es Rodrigo Fernández, quien convirtió cada cuarto en una experiencia diferente.

“Hallé esta casa que es de finales de 1800 porque me interesaba mucho salirme de las colonias a las que estamos acostumbrados y en las que vive el diseño”, platicó el cofundador del proyecto.


Además de las distintas lámparas, los asistentes apreciaron los efectos en los colores y tapices de las paredes.
“La luz es un factor base en el interiorismo, juega un papel, igual que acabados y texturas, y ayuda a destacar todos estos aspectos”, señaló el arquitecto Carlos Faci.


Entre las tendencias que se observaron estuvieron piezas con movimiento y con control de atenuación, así como el uso de materiales orgánicos para sus estructuras.

Conformé hacían el recorrido, los presentes no dejaron de tomar fotos y video de cada rincón que visitaban, así como de felicitar al anfitrión, quien disfrutó de la inauguración tanto como los invitados, quienes apreciaron cada detalle montado en cada uno de los spots en las exhibiciones.
“Me parece que está hecha a la perfección. Él ha hecho un trabajo increíble, porque cada sala es un tesoro, desde los colores y el papel”, expresó la escultora Grimanesa Amorós.