SUSPENDIDOS EN EL AIRE
De acuerdo con la Organización Mundial de Salud (OMS), la contaminación del aire se trata del mayor riesgo ambiental para los países de América, debido a los resultados que pueden causar en la salud de la población, principalmente en niños, mujeres y adultos mayores.
La contaminación del aire representa un importante riesgo medioambiental para la salud. Mediante la disminución de los niveles de contaminación del aire los países pueden reducir la carga de morbilidad derivada de accidentes cerebrovasculares, cánceres de pulmón y neumopatías crónicas y agudas, entre ellas el asma.
Organización Mundial de la Salud
El Gobierno de la Ciudad de México identifica principalmente seis contaminantes en el medio ambiente.
- Óxidos de nitrógeno: son emitidos por los escapes de automóviles, así como por chimeneas y estufas. Se forman durante la combustión que se produce cuando el oxígeno reacciona al nitrógeno.
- Ozono: es un gas incoloro, con un olor irritante y muy reactivo. Se forma de la reacción entre los óxidos de nitrógeno emitidos durante la combustión de los hidrocarburos, por el uso de combustibles fósiles y por la vegetación, en presencia de la luz solar.
- Monóxido de carbono: gas inodoro e incoloro. Lo emite la quema de combustible o de cualquier material orgánico. Es altamente tóxico.
- Dióxido de azufre: es un gas tóxico con un olor irritante. Lo produce la quema de sustancias que contienen azufre como combustibles, carbón y madera.
- Plomo: se trata de un metal pesado que se encuentra en las emisiones de industrias como las fundidoras, así como en algunos pigmentos y en el suelo.
- Partículas suspendidas: son materiales sólidos y líquidos que se encuentran en suspensión en el aire. En la Ciudad de México una fracción importante se forma de reacciones químicas en la atmósfera contaminada. Entre sus fuentes de emisión están las tolvaneras, los incendios, las emisiones de camiones y automóviles.
SUS EFECTOS
Debido a que se tratan de partículas diminutas, algunos de estos compuestos pueden ingresar al sistema respiratorio y convertirse en un peligro para la salud, causando reducción en la función pulmonar o agravando enfermedades respiratorias.
Síntomas a tener en cuenta
- Dióxido de azufre: irrita las vías respiratorias. En altas concentraciones, provoca broncoconstricción, bronquitis y traqueítis. Puede agravar enfermedades respiratorias y cardiovasculares.
- Dióxido de nitrógeno: irrita las vías respiratorias. En altas concentracioenes, puede provocar bronquitis y pulmonía.
- Ozono: irrita las vías respiratorias. En altas concentraciones, reduce la función pulmonar, agrava el asma, inflama las células que recubren los pulmones, agrava las enfermedades pulmonares crónicas.
- Partículas: agravan el asma y enfermedades respiratorias y cardiovasculares. La exposición crónica a altas concentraciones puede provocar un incremento en el riesgo de morbilidad y mortalidad.
- Plomo: causa retraso en el aprendizaje y alteraciones en la conducta.
- Monóxido de carbono: en altas concentraciones inhabilita el transporte de oxígeno hacia las células. Una exposición prolongada puede provocar mareos, dolor de cabeza, nauseas, estados de inconsciencia e inclusive la muerte.
- Benceno: produce efectos nocivos en la médula ósea. Se asocia con el desarrollo de leucemia mieloide. Daña el sistema inmunológico.
EVITA LA EXPOSICIÓN
Para protegerse de los altos niveles de la contaminación, las autoridades capitalinas recomiendan seguir estas medidas:
- Se considera que los grupos vulnerables a la contaminación son niños, mujeres embarazadas, adultos mayores, personas con enfemermedades respiratorias y cardiovasculares, quienes deberán reducir el tiempo de exposición en exteriores.
- A los deportistas, se recomienda sustituir las actividades de gran esfuerzo físico por otras menos demandantes. Se recomienda no entrenar cerca de vías de tránsito intenso.
- La población en general deberá limitar las actividades cívicas, culturas y de recreo al aire libre.
- Se recomienda evitar fumar.