Si los dejan...retirase en Tokio

Los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 dejarán marcados a varios deportistas mexicanos se celebren o no.

La justa nipona les representa su última aparición en escenarios olímpicos pues a algunos la edad les está cobrando factura, y otros quieren emprender sus proyectos de vida personales.

La taekwondoín María del Rosario Espinoza es una de esas tricolores que espera poner punto final a su trayectoria como deportista de alto rendimiento ganando la que sería su cuarta medalla.

Otros, como el gimnasta Daniel Corral aspira a alcanzar por fin el podio olímpico antes de despedirse de los pabellones de gimnasia de citas veraniegas.

Sin embargo, todos dependen de la evolución del Covid-19 a nivel global para poder cumplir sus planes de culminar a lo grande su carrera como seleccionados nacionales.

La más grande

La taekwondoín María del Rosario Espinoza aún debe imponerse a Briseida Acosta en una evaluación técnica, con fecha por definir, para ser la seleccionada olímpica para Tokio 2020 la categoría de más de 67 kilos.

La sinaloense confía en quedarse con esa plaza y entonces llegaría a sus cuartos Juegos Olímpicos de forma consecutiva, mismos en los que aspira a retirarse con un metal que agregaría a su Oro en Beijing 2008, el bronce en Londres 2012 y la plata en Río 2016.

Independientemente de su resultado en los escenarios nipones, María se despedirá como la mejor deportista olímpica mexicana de todos los tiempos.

María conoció la gloria olímpica en sus primeros Juegos, con el oro en Beijing 2008.

Por la que le falta

Al igual que María Espinoza, la clavadista Paola Espinosa debe ponerle su nombre a las plazas individual y sincronizada en trampolín de tres metros para llegar a Tokio.

La ex campeona mundial en la plataforma no tendría problemas en conseguirlo y entonces cerrará su historia olímpica con cinco ediciones de citas veraniegas en y con metales en pruebas por parejas: el bronce en Beijing 2008 al lado de Tatiana Ortiz, y la plata de Londres junto con Alejandra Orozco.

Espinosa ansía el metal olímpico que le falta en pruebas tirando sola, aunque ya no sera la primera mexicana en lograrlo, pues ese honor ya lo tiene Laura Sánchez, quien se colgó el bronce en el trampolín de tres metros de Londres 2012.

Espina clavada

El clavadista Rommel Pacheco también debe ganar primero su lugar en la selección olímpica para Tokio 2020 conforme a los criterios nacionales.

La fosa japonesa vería las últimas ejecuciones olímpicas del yucateco, quien además ya piensa en la política.

Rommel debutó en Atenas 2004, donde terminó décimo en trampolín y en plataforma. Cuatro años después, en Beijing 2008 ocupó la octava posición en la plataforma. No acudió a Londres 2012 mientras que Río 2016 finalizó séptimo en la plataforma y quinto en el trampolín sincronizado al lado de Yahir Ocampo.

"Genia" y figura

Tokio 2020 marcará el retiro de la ondina Nuria Diosdado, quien llegará a estos Juegos con dos experiencias previas. En Londres 2012 ocupó el casillero 18 junto, con Isabel Delgado, y en Río 2016 el sitio 11 haciendo dupla con Karem Achach.

Nuria dejará las albercas en general como la mejor exponente tricolor de la disciplina gracias a sus resultados en Juegos Centroamericanos y Panamericanos, en la edición más reciente de estos últimos, en Lima 2019, consiguió la plaza olímpica al ganar la plata en el dueto, también quedó subcampeona en equipo.

Nuria (al frente) ha sido la líder del dueto y el equipo de natación artística.

Longevidad olímpica

Uno de los especialistas en los 50 kilómetros de caminata más longevo es Horacio Nava, a quien siempre se le negaron los podios olímpico y mundial. El chihuahuense aún no registra la marca mínima para Tokio 2020 pero se confía en él para cumplir con el parámetro y llegar así a sus cuartos Juegos.

Su mejor resultado en olímpicos hasta ahora es el sexto lugar en Beijing 2008. En Londres 212 y en Río 2016 terminó en el casillero 13.

La tercera...¿es la vencida?

Subcampeón mundial en caballo con arzones en 2013, el gimnasta Daniel Corral quiere hacer válido el refrán popular de la que tercera es la vencida y que en su aparición olímpica en Tokio 2020 conquiste presea y deje los pabellones de gimnasia como medallista olímpico.

En Londres 2012 registra su mejor actuación en citas veraniegas con el quinto lugar en las barras paralelas; ocupó el peldaño 61 en el caballo con arzones. En Río 2016 figuró en el puesto 25 en las barras y 47 en arzones.