Los pasos sobre la tierra, el inconfundible aroma a ganado y el sol de las primeras horas del día han sido una constante en las labores diarias de los Uribe, durante generaciones.
En el caso de Julio Uribe Curn y Julio Uribe Barroso, hijo y padre, este nexo con la labor de campo ha sido no sólo motivo de orgullo y un detonante para nuevos planes profesionales, sino también ha sembrado en ellos virtudes que los unen de forma única.
“Viviendo en el mundo de las haciendas y los caballos te encuentras muy en contacto con el tema de cultura y tradiciones; desde pequeño, mi papá fue mi mentor en el tema de cómo montar, tratar a los animales y ver la vida a partir de la agricultura”, relató Julio Uribe Curn, quien egresó de Administración de Empresas por la Universidad Anáhuac México Norte.
A partir del 2005, la dinámica entre los “Julios” dio un giro hacia una perspectiva distinta, pues la experiencia y juventud sumaron esfuerzos en una asociación empresarial, la cual bajo el nombre de Ganadería Torreón de Cañas, ambos pusieron su ímpetu para destacar en el mundo taurino.
“Este proyecto nos ha acercado muchísimo, pues nos enseña a compartir el trabajo, el esfuerzo, la dedicación, la perseverancia, los fracasos y los triunfos, convirtiéndonos en uno mismo”, platicó el ganadero Julio Uribe Barroso, esposo de Lisa Curn y padre también de Stefanía Uribe.
“El compartirle el amor por el campo estoy convencido que fue la mejor forma de hacer de él un hombre de bien, ya que éste te acerca mucho a la naturaleza, a la gente de bien y, sobre todo, a Dios, que está presente en todos lados”.
Ser padre es la mayor bendición recibida de Dios nuestro Señor. De Julio, estoy orgulloso y agradecido, aunque por los dones que tiene, le espera mucho trabajo por delante”.
Con 35 años de edad y en buena medida gracias a la guía de su mentor, Julio Uribe Curn ha asumido la responsabilidad de continuar un legado de cinco generaciones de hacendados, el cual impacta a la comunidad que los rodea. De modo que, en la actualidad, aún con amplias vivencias y múltiples aprendizajes de por medio, continúa viendo en su progenitor una figura a emular.
“De él, me inspira su disciplina y capacidad de toma de decisiones, tan firme y segura, cuenta con una fijeza que permea; es algo que me ayuda para no ser indeciso y tener confianza”, dijo Julio Uribe Curn, CEO de la Hacienda Zotoluca.
“Además, cuenta con un sentido paternal conmigo y mi hermana, es un gran esposo, hace bonita pareja con mi mamá y, por ello, es alguien a quien admiro mucho”.
Emprender con él ha sido un viaje increíble, estoy agradecido y bendecido de poderlo vivir a su lado”.
+En la red
Julio Uribe Curn comparte momentos únicos junto a su padre, Julio Uribe Barroso.
Con 35 años de edad y en buena medida gracias a la guía de su mentor, Uribe Curn ha asumido la responsabilidad de continuar un legado de cinco generaciones de hacendados, el cual impacta a la comunidad que los rodea. De modo que, en la actualidad, aún con amplias vivencias y múltiples aprendizajes de por medio, continúa viendo en su progenitor una figura a emular.
“De él, me inspira su disciplina y capacidad de toma de decisiones, tan firme y segura, cuenta con una fijeza que permea; es algo que me ayuda para no ser indeciso y tener confianza”, dijo el CEO de la Hacienda Zotoluca.
“Además, cuenta con un sentido paternal conmigo y mi hermana, es un gran esposo, hace bonita pareja con mi mamá y, por ello, es alguien a quien admiro mucho”.
¿CUÁL ES EL PLAN PARA EL DÍA DEL PADRE?
+ Para celebrar el Día del Padre, Julio Uribe Curn no piensa en algo en particular, pues para él,
el convivir y pasar un momento al lado de su papá, Julio Uribe Barroso, montando a caballo, es el mejor pretexto
para expresarle palabras de agradecimiento y su profundo amor.