Aunque Ale Riquelme y Daniela García Galicia guardan memorias entrañables y familiares en torno al Día de Muertos, fueron las experiencias de pérdida las que les mostraron esta tradición de una forma distinta.
“Siempre decoraban mi casa, pero, de chiquita, yo era receptiva y me daba mucho miedo, por lo que dejó de celebrarse la tradición, por mi culpa”, recordó la escritora Ale Riquelme.
“Cuando murió mi perrita, un 27 de octubre hace tres años, uno de mis mejores amigos me envió de regalo una cajita con decoraciones para el altar, por lo que aproveché para ponérselo en honor a ‘Mina’ y, después, quise hacerlo más grande incluyendo y mis seres queridos”.
En el caso de Daniela García Galicia, su interés por acercarse más a esto, se dio tras el sensible fallecimiento de su padre, Antonio, en 2008.
+ Datos extra
Para crear este altar, Ale Riquelme y Daniela García Galicia visitaron un mercado típico capitalino, en donde escogieron algunas flores y frutas de temporada, como cempasúchil, calabaza y calaveritas de azúcar y chocolate.
Las tradiciones mexicanas me encantan, pero ésta me fascina por los colores, flores y calaveras”.
DANIELA GARCÍA GALICIA, diseñadora de modas
TRADICIÓN VIVA
Por lo que ahora, a partir de un pasaje triste de su vida, ha aprendido a disfrutar de estas festividades con una perspectiva distinta, enalteciendo el legado de alguien amado a través de lo que más disfrutaba.
“En vez de tristeza, siento bonito al buscar lo que le gustaba a mi papá, lo recuerdo con alegría, cariño y amor”, dijo Daniela García Galicia, diseñadora de modas.
“Después de que vi la película de ‘Coco’ me di cuenta de que era cierto que a nuestros muertos tenemos que mantenerlos presentes, y qué mejor que darles sus cosas favoritas, como refrescos, pastelitos, cuba y lo que le gustaba, no hay año que no lo ponga”.
En esta ocasión, las amigas montaron juntas un altar en casa de Ale Riquelme y, entre ambas, gozaron de un instante para rememorar a quienes se adelantaron en el camino en este Día de Muertos.
+ Detalles especiales
Para su altar, Ale Riquelme recordó a su perrita ‘Mina’, al caballo ‘Lord’, de su mamá; sus abuelos, su tía, Clarita, y sus bisabuelos, entre ellos el escritor Mariano Silva Aceves, con quien tiene un nexo especial gracias al gusto por las letras.
Por otra parte, Daniela García Galicia siempre lo arma con la ayuda de su madre, Marcela Galicia, y, en éste, nunca falta la foto de su papá, Antonio García, de sus mascotas, ‘Luca’ y ‘Goyo’; de su tío, Raúl, y amigos.
Las lágrimas no son un sentimiento de tristeza, si no de algo que llena, pues honrar a los difuntos es te deja muchas cosas buenas”.
ALE RIQUELME, escritora