Alejandro Descalzi se considera un hombre que se desvive por sus hijos a pesar de que hace tres años sufrió el golpe más grande y fuerte que un padre puede experimentar: la pérdida de su primogénito, Alessandro, a causa de cáncer infantil.

En su duelo no se dejó vencer, pues encontró la fortaleza para salir adelante en Dios, en su esposa, Laura Boyer, y su otro hijo, Paolo, así como en la voluntad del que ahora considera su ángel.

“Él está presente todos los días y fue quien me vino a enseñar sobre el verdadero significado de la vida, gracias a él vivo 
de manera muy singular, a tope y disfruto muchísimo a mi familia, nos dio demasiadas enseñanzas como apreciar más, dejar de esperar las cosas y ser pleno porque uno no tiene comprado el tiempo”, platicó el desarrollador e inversionista inmobiliario.

Alejandro con sus hijos, Paolo, Piero y Martinah
Alejandro y su esposa, Laura Boyer, con su hijo, Paolo, en el cumple 2 de Piero y Martinah

Debido a que le hizo una promesa de irse juntos a la playa, desde hace dos años los cinco integrantes de esta familia
residen en Cancún, lugar en el que creó un proyecto que deja ver lo unidos que son junto a Paolo, de 6 años, y los cuates
Piero y Martinah, de 2 años.

“’The Coconut Familiy’ tiene muchas funciones, esto nació hace un año y queríamos mostrar nuestro día a día, así como recomendaciones para los pequeños, para adultos, lifestyle y un poco de nosotros y, sobre todo, que aquellos que tengan problemas o que han vivido situaciones fuertes, se den cuenta que todo se puede solucionar”, contó el amante de la pesca.

“Sé que la pérdida de un ser querido es una situación complicadísima, pero se puede vivir con eso; en nuestro caso, él es quien nos hace seguir hacia adelante con todo y bajones horribles que llegamos a tener”.

Desde hace cinco años la familia reside en Cancún.
“Lo mejor que me ha pasado es convertirme en padre y, a pesar del dolor  del primero, él me enseñó lo que realmente vale ser papá; la diferencia
entre antes y después es que hoy en día disfruto al 100 por ciento mis días
y a mi familia porque nunca sabes qué puede pasar”.
ALEJANDRO DESCALZI
El mayor motor en la vida de Alejandra son sus hijos y su esposa.

El nombre de esta cuenta de Instagram surgió por el slang americano “The Coconut Life”, que representa la vida en la playa y el estilo tropical, la cual siempre les ha llamado la atención; además, por la metáfora de que las palmeras cocoteras durante un huracán se doblan, pero, al pasar la tormenta, recuperan su forma original.

El empresario asegura que al convertirse en papá reforzó el vínculo que tiene con su esposa, con quien celebra 19 años juntos, y afirma que tiene varias cualidades positivas que desea transmitir a sus tres pequeños.

“Me considero un papá liberal porque soy un alma libre, amiguero y humano, pero ante todo también están las reglas, a ellos hay que enseñarles y guiarlos sobre lo que es bueno y malo, quiero que me vean como un amigo, que tengan la
confianza de hablar conmigo de cualquier tema sin tabúes ni prejuicios”, mencionó. 

“También soy muy cariñoso y dadivoso, y les inculco el valor de lo que cuestan las cosas, así como que ante todo está el
respeto y debemos ayudar a la gente que lo necesita”.

Los fines de semana aprovecha para pasar tiempo de calidad con sus tres pequeños, quienes aman el mar.
El empresario lleva 19 años junto a su esposa.

Su plan favorito es el fin de semana porque pasa más tiempo con ellos y disfrutan diversas actividades como hacer un
picnic en la playa que tienen frente a su casa y ver el atardecer, así como pasear en yate, viajar a Isla Mujeres y esnorquelear.

Paolo es más grande y con él puedo hacer más cosas; por ejemplo, a él le encanta la vela y a veces me acompaña a 
buscar animales como cangrejos o iguanas porque a ambos nos gusta la fauna, en ocasiones los atrapamos, los cuidamos un par de días y los volvemos a soltar en su hábitat natural”, platicó Alex, de 36 años. 

Por otra parte, el padre de familia cree firmemente en que la clave en su relación familiar es estar presente para ellos y tener tiempo de calidad con todos, aunque también reconoce que crea un espacio para estar con su pareja y debe separar
los dos roles para tener una armonía total.

La familia es fan de los animales y la naturaleza.