Para Grace, como la llaman de cariño, la espera ha sido muy tranquila, pues se ha sentido muy bien e, incluso, pudo hacer un viaje largo a los cinco meses de embarazo. Ahora, con 31 semanas, lo que más le emociona es que su primogénito, Beto, conozca a su hermanito.
“Yo espero fomentar una relación muy cercana, porque creo que lo más importante es que estemos unidos, sobre todo, ellos. El grupo nuclear te da siempre estabilidad y fortaleza en la vida, entonces, quiero hacer énfasis siempre para que estén muy juntos”, compartió la futura mamá.