EL CRIMEN

El 29 de junio de 2020, la Rectora de la Universidad de Valladolid, Guadalupe Martínez Aguilar, fue asesinada a balazos en Xalapa, Veracruz.

Al menos dos hombres ingresaron a la institución alrededor de las 9:00 horas y cometieron el crimen que derivó en el despliegue de un operativo de seguridad por tierra y aire.

Por este asesinato están en prisión los hermanos July y Alberto Flores.

Rectora Guadalupe Martínez Aguilar

JULY, DE JARDINERA A PRESUNTA HOMICIDA

"Era mi mano derecha, ahora debo trabajar el triple", dice el papá de July.

Mientras peritos levantaban el cuerpo de Martínez Aguilar, a 300 kilómetros de distancia, July arreglaba un jardín en Cuautitlán Izcalli, Estado de México, relató su padre, Martín Flores, pues trabajan juntos. 

Además de ayudar a su padre, repartía comida en un coche que rentaba, un Honda blanco, el mismo que fue captado por cámaras de seguridad el día del crimen en Xalapa.

Días antes, aseguró el padre de July, el propietario del vehículo se lo había pedido para “darle mantenimiento” y después de unas semanas se lo regresó.

Llegada de July a la FGE de Veracruz el 7 de noviembre 2020

El 6 de noviembre de 2020, July fue detenida mientras viajaba con sus dos hijos y su esposo en ese auto. Al menos 11 policías ministeriales, sin identificarse y sin explicación, la sacaron del vehículo. 

Durante su traslado a Veracruz y en interrogatorios, fue golpeada, asfixiada y abusada sexualmente, además de recibir descargas eléctricas. Bajo tortura fue obligada a firmar documentos. 

LAS PRUEBAS

LA COMPRA-VENTA QUE NO EXISTIÓ

Videos de seguridad captaron a los responsables del crimen a bordo del vehículo blanco.

Agentes rastrearon la matrícula y llegaron al domicilio del dueño del Honda blanco, el mismo que July rentaba. 

El hombre, narró el abogado Rodolfo Párate, entregó a los ministeriales un documento de compra-venta del auto, en el cual falsificó la firma de July como la nueva dueña.

LA MUJER DEL VIDEO

El video fue presentado como prueba vinculante. Con las imágenes, la Fiscalía de Veracruz aseguró que fue July quien ese día bajó del vehículo. 

La defensa y los familiares de la detenida argumentan que la persona que aparece en el video no comparte características físicas con July, pues ella tiene tatuajes, el cabello largo y es de tez morena, mientras que la persona que desciende del auto tiene el cabello corto y sus brazos no presentan tatuajes. 

A la izquierda July; a la derecha, mujer que presuntamente participó en el crimen

El abogado de oficio que le pusieron se dio cuenta (de que había sufrido tortura), y de inmediato rechazó defender a mi hija, dijo que no podía defenderla porque no iba a ir en contra del Gobierno".

CNDH COMPRUEBA TORTURA

July fue vinculada a proceso y está presa en Pacho Viejo, en Coatepec, donde le fue practicado el Protocolo de Estambul, método a través del cual la Comisión Nacional de Derechos Humanos determinó que había sido torturada.

Por ello, emitió la recomendación 51/VG/2022 a la Fiscal Verónica Hernández y al Gobernador Cuitláhuac García.

Documento publicado por la CNDH

García se deslindó el 17 de febrero pasado de la recomendación al asegurar que la detención se realizó en otro estado.

No tenemos competencia en el asunto porque la detención fue en otro lado; que certifiquen en otro Estado qué fue lo que sucedió, así de sencillo, porque extrañamente la Comisión pone como verídico lo señalado por los presuntos responsables del homicidio de la rectora.

ALBERTO, EL OTRO DETENIDO

Un año después de la detención de su hermana, Alberto recibió la notificación de que afuera de su casa lo buscaban dos personas que portaban chalecos de la Secretaría del Bienestar. 

Preguntaban por él, supuestamente, para ofrecerle una beca por ser padre soltero.

Cuando salió para sacar copias y entregarlas, fue detenido de manera violenta por agentes de la Fiscalía de Veracruz, quienes tampoco portaban orden de aprehensión.

Detención de Alberto, 10 de noviembre de 2021

Al igual que su hermana, Alberto narró haber sido víctima de tortura. En su caso fue documentada desde su llegada al penal a través de un examen victimológico. 

Fiscales de Veracruz realizaron más de 57 descargas eléctricas en su torso, brazos y genitales, lo cual fue evidenciado a través de fotografías. 

También fue golpeado y le colocaron una bolsa de plástico en la cabeza para asfixiarlo. Bajo esos actos fue obligado a firmar documentos y declararse culpable.

Tenemos 5 horas para divertirnos contigo, hijo de tu puta madre, puñetas, ahorita vas a hablar y si no quieres hablar te vamos a echar a los tiburones, nosotros no nos andamos con rodeos".

PRUEBAS Y ACUSACIÓN

LA LLAMADA TELEFÓNICA

Las pruebas que presentó la Fiscalía de Veracruz contra Alberto fueron dos: 

  1. Una llamada que presuntamente realizó el 29 de junio de 2020 de Xalapa a Ciudad de México
  2. Ser hermano de July

FEMINICIDIO

A Alberto se le acusa de feminicidio, delito que tiene una pena mayor que el de homicidio, sin embargo, Rodolfo Párate, su abogado, aclaró que no mostraron pruebas de que el acusado y la víctima tuvieran algún tipo de relación. 

En la audiencia inicial, en la que también fue vinculado a proceso, Alberto mostró al juez las lesiones, por lo que fue sometido a un dictamen victimológico, aplicado por una perita del Poder Judicial de la Federación.

Alberto, padre de dos menores.

Presencia de lesiones físicas que presumen haber experimentado tortura, marca un estado de ansiedad alta y marcado sentido de minusvalía, temor y constante estado de alerta y tensión".

Tras comprobarse las lesiones, se otorgó el amparo 369/2021, el cual está detenido en el  Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal de Boca del Río, Veracruz. En tanto, July y su hermano siguen en prisión. 

LA VERSIÓN DE CUITLÁHUAC

Este 22 de marzo, al ser cuestionado sobre los dichos de reos que acusaron torturas para inculparse por delitos, el Gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, aseveró que mienten para salir libres.

“Existen protocolos para erradicar la tortura y nosotros hemos ido siempre buscando que se cumplan y lo seguiremos haciendo. No somos ni cómplices, ni facilitadores, ni nada, como lo era el Gobierno anterior”, dijo.

“Tenemos honestidad. A mí no se me puede señalar de ninguna de esas cosas. Algunos delincuentes saben que si dicen ‘me torturaron, me torturaron, me torturaron’ y es mentira, lo hacen para que de pronto puedan acceder a que te violaron el derecho a un proceso limpio, apegado a las normas, a la normatividad, y entonces quedas fuera”.