Complican proceso
Con gusto acepté ser funcionario de casilla, pero fue una sorpresa para mí lo increíblemente complicado el proceso de conteo de votos a comparación de mí misma experiencia en el 2000, ya que a partir de tres candidatos presidenciales, más los votos nulos y para candidatos no registrados, resultaron 17 combinaciones diferentes que había que computar, además de las diferentes combinaciones para las cuatro elecciones restantes.
[show_more color=»#612886» more=LEER MAS» less=MENOS]Desconozco la intención de haber complicado este proceso, ya que también los electores se confundieron al votar en coalición para el resto de las elecciones.
En el 2000 para las 7:00 pm ya habíamos concluido el conteo, pero en esta ocasión nos tomó hasta las 10:40 pm concluir el proceso, conociendo que en otras casillas terminaron hasta la 1:30 am del lunes.
Este proceso innecesariamente complicado sólo desalienta a la ciudadanía a volver a aceptar ser funcionario de casilla, además que esta complejidad en el conteo da pie fácilmente a impugnaciones de un proceso que debería ser práctico para facilitar su transparencia, lo cual parece que desean no sea así por parte de quienes diseñaron estos nuevos procesos complicados.
José de la Rosa
Monterrey
[/show_more]
Le queda sabor agridulce
Mi experiencia como presidenta de casilla de la sección 1431 C1 al sur de Monterrey fue algo agridulce.
Desde el momento de la convocatoria, simulacro y todo me emocionaba mucho participar, ya que nunca lo había hecho y también pienso que es algo que no puedes negarte como ciudadano.
El día de la elección, la gente que en su mayoría estaba muy comprometida. Hubo funcionarios que no llegaron en mi casilla, pero alguien de la fila se apuntó en ese momento para poder abrir y no nos fue tal mal.
Iniciamos el proceso a las 8:30 horas. Una de mis funcionarias ya había participado en elecciones pasadas, por lo que tenía conocimiento de lo que se tenía que hacer y gracias a eso todo fluyo perfectamente.
La participación de la gente para mi gusto fue mucha, esperaron por más de 2 horas para poder votar y la fila era de cuadras, pero el calor y la espera frustraban mucho.
Al dar las 6:00 p.m. dimos por cerrada la casilla e iniciamos el conteo de votos, y con la ayuda de la secretaria, que tenía experiencia, íbamos a un muy buen ritmo.
Mi sorpresa fue que en la noche ya habían dado por ganadora a Claudia cuando nosotros no habíamos terminado de contar todas las urnas, mucho menos actas llenas.
Acabamos un poco después de las 10:30 pm. de entregar todo y el personal del INE nos comentaron que nos fue bien en la hora porque hay quienes terminan hasta las 3 de la madrugada.
Comentando con mis familiares y amigos me surgen algunas dudas. En mi casilla estábamos creo yo, por el nivel socioeconómico sin que se lea mal, gente con un nivel de estudio arriba del promedio. Le batallamos para descifrar lo que teníamos que hacer sobre todo en el llenado de las actas.
Al final creo que cumplimos con el compromiso cívico de participar, tanto funcionarios como toda la gente que fue a votar en mi casilla. Es una experiencia que todo mundo debería de vivir al menos una vez en la vida, aunque el proceso sea un poco obsoleto, pero se ve la participación de todos.
Gabriela Hernández
Monterrey
[/show_more]