Kazan

La agrupación naval está compuesta por la fragata Gorshkov, el submarino Kazan, el buque petrolero de la flota Pashin y el remolcador de salvamento Nikolai Chiker.

El submarino ruso de propulsión nuclear Kazan arribó a Cuba como parte de un destacamento naval que realiza una estancia de cinco días en la isla, en el contexto de las crecientes tensiones entre Estados Unidos y Rusia.

Minutos después de la 10:00 horas locales, el Kazan ingresó a la bahía de La Habana mostrando sobre la superficie del mar una parte de su joroba y la torreta con una bandera cubana, constató la AFP.

De acuerdo con reportes, el submarino es el más potente del Ejército ruso hasta la fecha. El Kazan es capaz de transportar cientos de misiles y alcanzar velocidades de hasta 31 nudos.

Según la agencia estatal de noticias rusa TASS, Kazan ha sido diseñado para destruir submarinos, buques de superficie, bases navales y puertos enemigos, entre otros objetivos.

¿Es o no una sorpresa?

La subsecretaria de prensa del Pentágono, Sabrina Singh, dijo a la prensa que Washington ha estado siguiendo estos movimientos.

“No es una sorpresa” porque los rusos han realizado antes este tipo de escalas en puerto de la isla caribeña, añadió. La funcionaria dijo que estas visitas “no suponen una amenaza para Estados Unidos”, cuya costas en el estado de Florida están a unos 160 kilómetros de La Habana.

No obstante, el consejero de seguridad nacional, Jake Sullivan hizo ver que esta flota “tiene un submarino” de propulsión nuclear “que no han tenido” las flotas que han venido con anterioridad.

¿Provocación o muestra de poder?

Ryan Berg, director del Programa de las Américas del Center for Strategic & International Studies, dijo a AP en un correo electrónico que “la doctrina militar y de defensa rusa mantiene a América Latina y el Caribe en una posición importante. La región es vista como una esfera de influencia estadounidense y, por tanto, es el contrapeso a la proyección de poder estadounidense en el teatro europeo, especialmente en el exterior cercano de Rusia”.

Agregó que “si bien esto probablemente no sea más que una provocación por parte de Moscú, envía un mensaje sobre la capacidad de Rusia para proyectar poder en el hemisferio occidental con la ayuda de sus aliados y ciertamente mantendrá al ejército estadounidense en alerta máxima mientras esté en el teatro de operaciones”.