Ana Paula Ricalde y Fernando Figueroa se convirtieron legalmente en marido y mujer en una boda llena de detalles digna de una chick flick. Y no podía ser para menos, pues la novia es fanática del cine, en especial, de aquellas cintas que son estelarizadas por princesas.
“La verdad, fue un momento de película en todos los sentidos, me peiné como Bella y usamos la canción de ‘This Will Be (An Everlasting Love)’, en cuanto la juez nos declaró esposos, porque crecí amando ‘Juego de Gemelas’”, contó Ana Paula Ricalde, licenciada en Relaciones Internacionales.
La trama de esta historia de amor comenzó en las aulas de la Universidad Anáhuac México Norte, donde se conocieron en su primer día de clases y, como en todo largometraje de romance, aunque Cupido los flechó de inmediato, ella tenía pareja.
Me sentí muy querida y apapachada por todos mis amigos y familia”.
ANA PAULA RICALDE, novia
Para mí, la boda civil significó el cierre de un ciclo de nueve años y la apertura de otro que empieza con mucha ilusión de vivir cada parte de nuestra vida”.
FERNANDO FIGUEROA, novio
UN DÍA DE PELÍCULA
Fue dos semanas después que comenzaron su noviazgo y, justo en una fecha significativa para los dos, firmaron el acta matrimonial.
“Ese día significó el fin de una era y el inicio de otra; nos casamos el día que cumplimos nueve años de novios, fue como cerrar con broche de oro una etapa que nos hizo muy felices”, relató la maestra particular de inglés.
La boda civil de Ana Paula Ricalde y Fernando Figueroa tuvo varios detalles significativos, uno de los principales fue que pudieron ver a sus abuelos firmar el álbum de testigos de honor y, otro, que Ana Paula usó una adaptación del vestido de novia de su mamá, Erika Muench.
“Siempre supe que quería mi propio ajuar para la boda religiosa, pero el de ella es súper bonito. Hace varios meses, le pregunté si me dejaría cortarlo y, obviamente, le fascinó la idea”, platicó Ana Paula Ricalde.
Los 60 invitados a la recepción le desearon lo mejor a la pareja y la aconsejó para este paso que dieron en su relación.
“Querida hija, ahora entras a una etapa de completa realización, en el matrimonio complementarás tu vida con Fernando y darán inicio a una familia; en ella, se viven los momentos más felices que tendrás, pero también es una fase de total responsabilidad, en la que, sin duda, tendrán que enfrentar muchos obstáculos que sólo juntos podrán superar”, dijo Pablo Ricalde, papá de la novia.
Ahora, los esposos Ana Paula Ricalde y Fernando Figueroa esperan, en unas semanas, la secuela de su propio filme con su llegada al altar para darse el “sí, acepto”.
+ Twist nostálgico
+ El vestido de Ana Paula Ricalde fue una adaptación del modelo que usó su mamá, Erika Muench, en su boda religiosa.
+ El diseño lo realizó una de sus mejores amigas, Taylor Nevin, y la confección es de Valeria Rangel, quien hizo su ajuar para el enlace por la Iglesia.
Mi consejo es que siempre tengan una buena comunicación para llegar a acuerdos y encontrar siempre el equilibrio sano en sus diferencias; nunca dejen de ser amigos y de tener detalles”.
ERIKA MUENCH, mamá de la novia
Cada uno de los obstáculos que enfrenten será siempre un acertijo por resolver y del que deberán aprender para crecer; nunca una prueba será más grande que la suma del amor con que la combatan y el superarla traerá las más dulces recompensas y satisfacciones”.
PABLO RICALDE, papá de la novia
+En la red
A través de redes sociales, Ana Paula Ricalde compartió diferentes momentos de su boda civil con Fernando Figueroa.