Freepik

Los caballos son reconocidos por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como compañeros eternos de las personas porque han contribuido profundamente al progreso de la humanidad y reconfortado corazones desde la antigüedad.

Cuidarlos, protegerlos y rescatarlos es la misión de algunos santuarios de México, que aceptan donaciones y otro tipo de ayuda para lograrlo.

Cuacolandia (Facebook)
  • Ubicado en Tlaxcala, es un santuario dedicado a cuidar y rescatar animales de la familia de los équidos, a la que pertenecen burros y caballos. Sus habitantes provienen de situaciones de abandono y maltrato.
    Quienes deseen contribuir a la misión de asegurar el bienestar y la felicidad de estos residentes pueden apadrinarlos con un donativo mensual.
  • Otras opciones son realizar una donación única de monto variable, donar en especie y comprar productos en su tienda. También acepta voluntarios.
Por Nuestros Hermanos Sin Voz AC (Facebook)
  • Una de las varias especies que rescata este santuario localizado en Hidalgo son los caballos, que conviven con otros animales previamente abandonados o maltratados, entre ellos borregos, burros, cerdos, gatos, patos y perros.
  • Los domingos emprende colectas de alimento en el Kiosko Morisco de la Ciudad de México. Cuenta con una mesa de regalos para cubrir las necesidades de artículos de limpieza y construcción, así como alimentación. Además es posible otorgarles donativos.
Seres Libres - Animal Rescue (Facebook)
  • Aunque este santuario del Ajusto en la Ciudad de México rescata diferentes especies en circunstancias de abandono, explotación, maltrato y vulnerabilidad, su especialidad son los burros y caballos, a los cuales rehabilita.
  • Organiza múltiples actividades de voluntariado, que van desde asistir al personal en campañas de recaudación de fondos hasta el cuidado diario de los ejemplares. Apadrinar a los animales con montos mensuales fijos o brindarles donativos son otras ideas para ayudar.
Tierra de Animales (Facebook)
  • Caballos y yeguas viven en este santuario de Quintana Roo, donde no tienen que cargar personas sobre sus espaldas ni remolcar carga. Según sus cuidadores, sólo se les ponen las manos encima para acariciarlos y bañarlos.
  • Sus actividades de voluntariado son variadas: atender y cuidar a los animales, darles de comer y limpiar las áreas donde descansan. A veces también se requiere apoyo para pintar espacios y darles duchas a los residentes. Las donaciones son otra manera de apoyar.


También buscan ayuda:

Fuentes: ONU y redes sociales de santuarios.
Edición: Tonatiúh Rubín.
Síguenos en @reformaverde

Derechos Reservados