Una profunda melodía acaba de cimbrar al estacionamiento subterráneo en el que me encuentro. El canto es grave, como de una época pasada, y lo entona el motor del vehículo que justo encendí: el V8 está de vuelta en el Porsche Cayenne GTS Coupé.

En el modelo anterior Porsche cedió ante la tentación del downsizing y, entre 2015 y 2018, un bloque V6 con doble turbo sustituyó al 8 cilindros con el que debutó en 2007, esta versión que se ubica entre el Cayenne S y el Cayenne Turbo.

Pero la sangre llama, y el ADN deportivo de las míticas siglas GTS terminó por imponerse en la tercera generación de Cayenne. Su nuevo portador ruge, desborda potencia, y le basta la más mínima insinuación al presionar el acelerador. La herencia del V8 revivió.

Pero si bien el bloque biturbo de 4.0 litros de desplazamiento es el protagonista del nuevo GTS, a éste lo acompaña toda una orquesta afinada en la sintonía de la deportividad.

Además de la suspensión, que recorta en 20 milímetros la altura del SUV frente a la variante S, y el sistema que ajusta la rigidez de los amortiguadores, el Cayenne GTS incorpora de serie un sistema de escape especialmente diseñado para reproducir las frecuencias altas, y que se estrenó en esta versión, antes, incluso que en la poderosa tope de gama Turbo que, es cierto, es más rápida, pero no por eso, necesariamente, más deportiva.

En el primer túnel que sale al paso no puedo resistirme y empujo el acelerador: el rugido se expande, lo adereza el petardeo. Ni siquiera ha sido necesario ir a fondo.

La dirección se percibe rígida, con una respuesta precisa e inmediata, como si el espíritu de un deportivo habitara en su manejo y no sólo en la silueta coupé que, dicho sea de paso, se combina con espejos laterales en fibra de carbono, pinzas de freno de color rojo y un alerón trasero que se despliega a los 90 kilómetros por hora. 

En curvas constantes, el Cayenne se planta a alta velocidad, y cambia de dirección con una agilidad nada propia para un vehículo de 2 toneladas y que, sin temor, también puede adentrarse en caminos de terracería ligera.

Los interiores le rinden tributo a la velocidad con tapicería de piel con costuras de contraste, volante tapizado en Alcántara, y asientos tipo cubo. En esta atmósfera encontramos también una pantalla táctil de 12.3 pulgadas con Apple CarPlay y un panel que muestra la instrumentación digital y sobre el que se incrusta el tacómetro analógico en color rojo.

Con 460 caballos, las siglas GTS volvieron a sus orígenes. Refulgen, poderosas, en la parte trasera de este Cayenne.

En un vistazo:

Porsche Cayenne GTS Coupé

  • Motor: V8 biturbo 
  • Potencia: 460 hp
  • Torque: 457 lb-pie
  • $2,218,000