
En la antigüedad, en Mesopotamia y Egipto, se encontraron vestigios de los primeros lentes que se utilizaban como elementos decorativos y, posteriormente, para magnificar imágenes.
En el siglo XVIII aparecieron las primeras gafas como tal, utilizadas por los monjes y eruditos en los conventos para leer y estudiar manuscritos.
Hoy, los lentes de sol son un accesorio muy deseado ya que los cristales protegen mucho de los dañinos rayos del sol, por lo que se recomiendan en esta temporada de vacaciones.
Además, presentan innovaciones tecnológicas como peso ligero, formas ergonómicas que se adaptan al rostro así como cristales entintados y antirreflejantes, también con efectos degradados, para mayor resguardo de la vista.
Para esta temporada predominan los estilos retro, de los años 60 y 70, principalmente los inspirados en los aviadores, así como los que tienen forma de cat-eye, o de gatito, que fueron muy usados por las chicas en esas épocas.
Las monturas son grandes, con formas geométricas sobre todo cuadradas, hexagonales o con forma de mariposa, ya que, inspiradas en los estilos de las divas de Hollywood, siempre agregan un aire glamoroso.

Además, muchas firmas han apostado por usar materiales sostenibles y reciclados en su fabricación, pues existe una gran preocupación por cuidar el medio ambiente.
“Usar lentes se trata de una forma de ver y verse mejor, enalteciendo valores como la calidad, el prestigio, la reputación y el mejor estilo”, afirma Rodrigo Alday, curador de lentes con más de 20 años de experiencia en sus empresas Tangerine Supply Co, La Grande Armée y Luxury Corp, que manejan exclusivas marcas como Cartier, Valentino, Balmain, Dita, T Henri, Akoni y muchas más.

Cómo cuidarlos:
- Usa un paño de microfibra especial para evitar rayones.
- Utiliza una solución limpiadora para este propósito. Si no tienes, agua tibia y jabón suave te serán útiles.
- Guárdalos en estuches rígidos para evitar golpes y rayones.
- No los expongas directamente al sol.
- No los coloques encima de la cabeza, ya que esto puede modificar las patillas.
- Aléjalos de productos químicos como perfumes, lacas para el cabello, etc.
- Llévalos a una limpieza y revisión profesional cuando menos una vez al año.
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