Si el festejo de la Independencia te dejó con una cruda marca diablo, checa qué es lo que estás sintiendo y cómo mejorarte.

“Cuando las personas no tienen mucha experiencia en el consumo de bebidas alcohólicas pueden llevarse una gran desilusión al día siguiente cuando, al despertar, sienten que la cabeza les va a explotar, tienen náuseas o no pueden resistir sonidos tan cotidianos como el timbre de un teléfono”, explica Mitzi Agundiz, nutrióloga.

“Estos síntomas son la manera en la que nuestro cuerpo nos está diciendo que lo que recibió el día anterior fue un exceso de toxinas y necesita eliminarlas”.

Pilar Muñoz, nutrióloga certificada por The Zone Inflammation Research Foundation, agrega que los síntomas que causan la cruda o resaca se deben a dos factores: el alcohol es diurético, por lo que puede causar deshidratación y pérdida electrolitos y minerales que mantienen el equilibrio de fluidos, como el potasio, y cuando los niveles bajan, aparece el dolor de cabeza, la fatiga y las náuseas.

Otra causa es que las cantidades excesivas de alcohol afectan al hígado, cerebro, sistema gastrointestinal, sistema nervioso central y percepción sensorial; también pueden interrumpir el sueño, afectar el estado de ánimo, la atención y la concentración.

NO LE ECHES MÁS FUEGO

Uno de los errores de la gente cuando presentan resaca es tomar más alcohol o ingerir alimentos con mucha grasa o condimentados.

“Muchas veces consumen más alcohol para ‘curarse la cruda’, y lo único que se consigue es postergar estos efectos, porque el alcohol sigue circulando por el organismo y el hígado tiene que metabolizarlo de alguna manera”, mencionó Agundiz.

“Se recomienda evitar las bebidas con cafeína, ya que producen deshidratación, y consumir muchas frutas, porque ayudan a que el cuerpo se desintoxique más rápido”.

Agundiz coincide que beber mucha agua favorece reponer los líquidos que se han perdido, por ejemplo, la cerveza tiene un efecto diurético y se requiere algún tipo de bebida isotónica o suero para recuperarse.

“Comer alimentos ligeros, no muy grasosos o condimentados, porque una de las desventajas del consumo de alcohol es que también se irrita mucho la mucosa del estómago, generando molestias como gastritis o colitis; de preferencia consumir una sopa de verduras o un plato de frutas o una ensalada”, agregó.

¿HAY UNA CURA?

Muñoz admite que no existe cura para la resaca, sólo la abstinencia del alcohol o tomar con moderación, pero existen alimentos que ayudan a aminorar los síntomas.

Hay personas, sin embargo, que toleran la ingesta de alcohol y no sufren los síntomas de la resaca.

“Existen muchos factores que influyen en la tolerancia al alcohol, no hay una manera precisa, probada y objetiva para medirla, pero se puede tener una idea a partir de la experiencia personal.

“A veces existe mayor tolerancia para quienes tienen más peso o son bebedores frecuentes”, enfatiza Muñoz.

Ambas especialistas coinciden en que para evitar la cruda o resaca se recomienda tomar un vaso de agua natural entre cada bebida alcohólica, lo que librará de la deshidratación y, por ende, esas terribles molestias al siguiente día.

ALIVIÁNATE

Estos alimentos que ayudan a mejorar los síntomas de una resaca:

Agua de coco: Es un excelente hidratante y contiene mucho potasio, un mineral que ayuda a sentirse mejor al estar deshidratados por el alcohol.

Huevo: Este alimento tiene una gran cantidad de cisteína, que es un aminoácido que puede ayudar a disolver el alcohol y que actúa como un depurador.

Fruta: El azúcar de las frutas ayuda a aumentar naturalmente la energía, además, las vitaminas, minerales y fibra que contiene ayudan a sacar las toxinas del alcohol.

Plátano y tomate: Existen estudios que demuestran que altas dosis de vitamina B6 reducen los síntomas de la resaca. Un plátano tiene la mitad de la dosis diaria recomendada de B6. Ambos alimentos también contienen potasio, un mineral que se pierde con la deshidratación y es clave para sentirse mejor.

Jengibre y romero: Son lo mejor para aliviar las náuseas y la sensación de mareo. Se pueden consumir en té. El jengibre fresco puede irritar el estómago vacío.