1. Medicina preventiva

Antes de pensar en enfermedades, hay que prevenirlas. Lo ideal es llevar a las mascotas 2 veces al año a desparasitaciones y chequeos con un médico veterinario general.

2. Credenciales del médico

Revisar su título universitario en una institución reconocida, que tenga las cédulas profesionales estatal y federal, que muestre diplomas o certificados donde se pruebe su capacitación continua para actualizarse.

3. Labor previa

Ante la sospecha de un padecimiento, la observación previa a buscar un médico es importante.

Se recomienda que el propietario diferencie el comportamiento y la forma de caminar de su mascota para detectarle síntomas. También debe estar al tanto sobre su alimentación y qué hubo diferente en ésta.

4. Especialidades

La Medicina Veterinaria se ha expandido al grado de que hay especialistas en diferentes ramos.

 

Hay dermatólogos que atienden infecciones en la piel; ortopedistas y traumatólogos, enfocados en la salud de las piernas y pies; cirujanos; oncólogos, para las especies que desarrollan cáncer; veterinarios generales, que atienden asuntos de reproducción.

 

También existen especialistas en especies exóticas con presencia doméstica, como erizos, aves y reptiles (víboras, lagartos).

Información: Maggie Urzúa. Fotos: Archivo Grupo Reforma