Wendy Sánchez Muñoz nació el 2 de noviembre de 1987 y es hija del matrimonio conformado por Carlos Sánchez y María Muñoz, quienes la criaron junto a sus hermanos Khristian, Karla y Baruc.
“Wendy es la persona que se puede describir diciendo ‘tiene chispa o tiene ángel’, es una apasionada por el arte, por la creatividad, por la naturaleza, le gusta crear, le gusta experimentar, y sobre todo disfruta el ayudar a los demás”, comparte Baruc.
Wendy es una de las pocas personas afortunadas que logró convertir sus pasatiempos en su estilo de vida, agrega Baruc, pues disfruta salir a caminar por la playa, ver un atardecer, y luego trabajar haciendo una obra de arte o diseñando algo nuevo.

“Wendy es una persona preciosa, llena de sueños y metas tras las cuales siempre va, creativa en la más pura esencia que la palabra representa, dispuesta a conocer nuevas formas de vivir, de tomar la vida, siempre lista para aprender algo nuevo, de manos talentosas y mente curiosa, ha experimentado con muchas disciplinas y técnicas como el diseño y arquitectura, la escultura, el grabado, la cerámica y el barro”, platica Metztli Cerda, una de sus mejores amigas.
“Amante de la naturaleza, ha incursionado también en la agricultura orgánica y el reciclaje, mismo amor que la llevó a vivir en la playa abrazada por los atardeceres, sintiendo la arena bajo sus pies; siempre inquieta y creadora, ha incursionado en la joyería y la floristería”.

La familia reunida. Atrás: Karla, Baruc y Khristian Sánchez. Abajo: Wendy Sánchez, María Muñoz y Carlos Sánchez.

Sus pasiones

Antes de su desaparición, Wendy llevaba casi tres años radicando en San Pancho, Nayarit, donde, según platica su hermano Baruc, dedicaba su vida a la creación: consignaba piezas de arte en distintos hoteles y también realizaba diseño de interiores.
“Wendy tiene muchos planes, iba abriendo su tienda Marea, un pequeño local de venta de arte y diseño, y en un futuro planea encontrar algún lugar donde pueda desarrollar residencias artísticas en San Pancho”, afirma Baruc.
“Le apasiona la vida misma, las pequeñas cosas, disfrutar del día a día, poder sentarse a ver atardeceres en San Pancho es lo que más disfruta”.

Murales en honor a Wendy Sánchez; están ubicados en la Colonia Americana, y sus autores son, de izquierda a derecha, Eksen One, Ale Poiré y Sirock.

¡Conócela!

Como hermana

“(Ella es) leal, cercana, siempre está ahí cuando se le necesita, siempre tiene las palabras indicadas para decir. Wendy y Karla se convirtieron en un gran team, siempre apoyándose en todo”, comparte Baruc.
“Recuerdo perfectamente que siempre corría a defenderme, pues yo soy su hermano menor, siempre que alguien me molestaba o me metía en problemas, Wendy corría a defenderme”.

Siempre positiva

“(Lo que más recuerdo es) su forma tan sencilla de abordar la vida, todo fluye con ella, no había días malos, solo malos ratos, y después regresa esa chispa que la caracteriza”, platica Baruc.

Algunas de las piezas creadas por Wendy

Buen corazón

“Es una persona que cree en la justicia, hace unos años participó activamente en Techo, una organización que provee viviendas de emergencia a familias que lo necesitan”, cuenta Baruc.

Sigue la búsqueda

Wendy desapareció el 9 de enero mientras se dirigía de Nayarit a Guadalajara, un viaje que era parte de su rutina, pues lo efectuaba cada 15 días para visitar a su familia y buscar nuevas piezas de arte para su tienda.
“Ha sido un proceso lastimosamente lento, los datos que tenemos es que jamás logró atravesar hacia el Estado de Jalisco, nosotros como familia tenemos toda nuestra esperanza y fe puesta en la Fiscalía para que den con el paradero de Wendy”, explica Baruc.
Desde entonces, la sociedad tapatía ha sumado esfuerzos con personas de otros estados de la República para difundir el caso y lograr que Wendy pueda reencontrarse con sus seres queridos.
“Estamos muy agradecidos con todos; en estos momentos de dolor e incertidumbre, cada mensaje que recibimos nos da mucha fuerza para seguir, ahora sentimos que no solo somos su familia buscándola, somos todo México esperando noticias de Wendy”, afirma Baruc.
“(Hasta hoy) se han realizado acciones en Guadalajara, Guanajuato, Ciudad de México, Puebla, Tepic, Querétaro, la verdad es que ya no llevo la cuenta, solo mantengo mi agradecimiento a todas y todos los que han elevado su voz por Wendy”.

Mural del Colectivo Mestizos

Revolución mediática

Familiares y amigos de la joven desaparecida crearon el #TeBuscamosWendy para dar movimiento a su caso en redes sociales como Instagram y Twitter.
Además, decenas de artistas, diseñadores e ilustradores se han unido a la causa creando diversas imágenes para compartir y no olvidar que la búsqueda por Wendy sigue y no se olvida.

Grito de ayuda

“No olviden a Wendy, no permitamos que se convierta en una cifra más sin rostro, sin historia, que nos ayuden a exigir su pronto regreso a las autoridades, que la presión que hemos ejercido como sociedad siga haciéndose sentir.
“En un País con una crisis de desaparecidos no podemos perder la empatía, hoy es mi hermana y mi familia la que atraviesa por esto, pero lamentablemente nadie nos puede asegurar que el día de mañana no seamos nosotros, por eso es importante visibilizar y ser empáticos con esta situación que viven miles de familias.
“(Estamos) con esperanza, no hemos abandonado la esperanza de que Wendy regresará sana y salva con nosotros, nos mantenemos con fe y haciendo todo lo que esté en nuestras manos por ayudar a las autoridades”.

Baruc Sánchez

En voz de sus amigas

Metztli Cerda

“(Wendy) recientemente se convirtió en una vocera del arte generando con su tienda/galería un espacio para la venta y reconocimiento del talento de otras y otros; sin duda a su paso en cada lugar toca un montón de corazones. Con Wendy siempre habrá risas y uno que otro jalón de orejas, porque en nuestras diferencias también hay encuentros.
“Conocí a Wen hace 10 años, el modo en el que ella y su familia me acogieron en su hogar es algo de lo cual estoy profundamente agradecida. Nos encontramos mientras hacíamos un voluntariado con Techo, una ONG que trabaja por una sociedad justa y sin pobreza, un grupo de jóvenes que creemos que el mundo puede cambiar, y trabajamos para hacerlo posible.
“Lo que más atesoramos de esa etapa fue la comunidad que creamos y las amistades entrañables que hicimos, cuando pones el corazón trabajando en las profundas grietas que nuestro sistema tiene, las conexiones que se generan son irrompibles, pero hoy este País al que Wendy le ha dado tanto le queda en deuda, así como a las más de 73 mil personas desaparecidas y sus familias que tiene registradas la Secretaría de Gobernación.
“Es profundamente doloroso atravesar estos más de 50 días sin Wendy, la desesperanza abruma y el nivel de violencia pareciera que nos ahoga de a poco, pero no nos vamos a soltar.
“Les invitamos a sumarse a la lucha, a que el nombre de Wendy siga sonando y resonando, por ella y por cada una de las mujeres que hoy nos faltan, y a las que el Estado nos falla a diario, exigimos a las autoridades su pronto regreso a casa, a abrazar a los suyos, a seguir haciendo de este mundo un lugar justo y libre, un espacio donde ser feliz”.

Aldonza Hidalgo

“Conocí a Wendy en 2011 en Querétaro, durante una actividad de construcción de viviendas de emergencia de la organización Techo, en la que éramos voluntarias.
“Desde ese momento nos hicimos amigas, fue muy fácil ser su amiga, recuerdo que en la cuadrilla de trabajo en la que ella estaba iban mucho más avanzados que en la que yo estaba, entonces pidió permiso para ir a mi cuadrilla y ayudarnos, recuerdo que después de ese largo día de trabajo todos juntamos nuestro dinero y compramos cocas y pan dulce.
“Cuando mi mamá murió, Wendy no dudó ni un momento en viajar hasta León para estar conmigo. Cuando decidí mudarme a Puerto Vallarta el año pasado, me abrió las puertas de su casa en lo que yo conseguía casa.
“Para mí esa es Wendy, es la persona que no importa cómo, pero siempre estará, es la amiga que sin importar las condiciones buscará la forma de demostrar que te quiere, que está ahí para ti, que le importas.
“Wendy es adicta a ver atardeceres, todos los días sin importar qué, intentaba ir a la playa para ver el atardecer, me enseñó a aplaudir cada vez que esto sucedía, es su manera de dar gracias por un día más”.

#TeBuscamosWendy

Información: Jimena de la O.