1. INVESTIGA
Una de las primeras cosas que podrías hacer es investigar qué organismos de flora y fauna habitan en el sitio que vas a visitar.
“Necesitamos saber cómo está nuestra biodiversidad, en qué condiciones se encuentra el ecosistema”, señala Adrián Lozano Garza, director de Sociedad Sostenible A.C. (SOSAC).
“En cualquier horario podemos encontrar organismos y conocerlos es fundamental si queremos cuidar el espacio”.
Sugiere utilizar Naturalista, una plataforma de ciencia ciudadana para aprender sobre plantas y animales.
Tiene una página de internet y una aplicación móvil. Todos pueden consultar, registrar y compartir lo que observan en el ecosistema.
2. PLANEA
Antes de arrancar el automóvil, hay algo muy importante por hacer.
“Lo primero que yo recomiendo es que las personas que quieren salir, que planeen su viaje”, indica Miguel Villarreal, excursionista e integrante del Colectivo La Bola, que promueve el desarrollo sostenible.
“Que planeen en función de lo que van a consumir, de lo que van a hacer, de lo que van a hacer de actividad recreativa”.
Esto ayudará a generar menos basura y evitar incendios.
3. EVITA BASURA
La indicación de no tirar basura ya es bien conocida. Y, aunque es vital respetarla, hay que ir más allá.
No sólo hay que depositar la basura en el lugar adecuado: es importante evitar producirla.
Por ello, procura que los alimentos que se van a consumir sean transportados en contenedores para no generar basura.
“Desde que estoy preparando mi viaje en la casa tengo que prepararlo sin basura, llevando contenedores que son reusables, no llevando PET”, apunta el director de SOSAC, que trabaja por el desarrollo sostenible.
“Sí llevando termos, jarras, agua en botes reusables”.
También hay que hacer un esfuerzo para eliminar la contaminación que ya existe.
La invitación es, que si ves basura en el paraje que visites, busca recoger lo que sea posible y depositarlo en el sitio indicado.
“Si vas a desplazarte a un sitio que hoy está contaminado”, apunta Lozano. “Hazle un favor al sitio: te está recibiendo”.
4. NO AL FUEGO
Tras los recientes incendios registrados en el Municipio de Santiago, el Gobierno del Estado prohibió las fogatas a fuego abierto en el Parque Nacional Cumbres.
Para muchos puede resultar complicado pensar cómo cocinar lo que se va a comer durante la visita. La clave es llevar alimentos previamente preparados o que no requieren cocinarse.
“Llevar el alimento ya prehecho, que sabemos que los podemos consumir sin necesidad de utilizar fuego”, detalla Villarreal, del Colectivo La Bola.
El Gobierno estatal también recomienda no dejar fragmentos de vidrio, cristales, espejos o botellas, pues podrían provocar un incendio con los rayos del Sol.
Tampoco se deben encender cigarrillos, cerillos o encendedores.
En caso de prender algún fuego, indica Lozano, es indispensable que sea en un espacio destinado específicamente para ello y asegurarse de apagarlo.
“Siempre la mejor opción será evitarlo”, apunta.
5. CUIDA EL AGUA
Ésta es una gran oportunidad para reflexionar sobre el cuidado del agua.
Al salir de paseo a un sitio natural, el agua disponible está limitada al espacio o la cantidad que se pueda transportar.
“Aprovecha el ejercicio para observar cómo usas el agua, cómo le haces en un entorno donde no tienes agua, donde sólo cuentas con la que te pudiste llevar en el coche”, aconseja Lozano.
“Aprovechar las vacaciones para aprender, ahorita que nos urge aprender sobre el agua”.
6. RESPETA
Seguro te ha pasado que cuando visitas algún lugar natural te dan ganas de llevarte una flor, una planta, una piedra o hasta un insecto.
Por más tentador que sea, no lo hagas. Podría parecer inofensivo, pero hacerlo es alterar el equilibrio del ecosistema.
“Lo que estamos provocando con desplazar organismos de su ecosistema y llevarlos a otro ecosistema, es que el riesgo es que aceleramos la extinción de especies porque estamos rompiendo el equilibrio del ecosistema”, destaca Lozano.
En vez de llevarlo, puedes optar por tomarle una foto y registrarlo en Naturalista.
Así contribuyes con la ciencia ciudadana.
Aprovecha el toma el tiempo para disfrutar del espacio.
“La idea es que el lugar que visitemos lo mantengamos como está porque sabemos que eso lo vamos a disfrutar nosotros”, aconseja, “y queremos que lo disfrute otra persona que vaya también”.