Para los pequeños Emil y André Harfuch, la saga animada de Disney, “toy story”, es una de sus principales obsesiones diarias, por ello, sus papás, May Karam y Amado Harfuch, no dudaron en cumplirles la ilusión de celebrar al máximo a dos años de que los cuates llegaran a cambiar sus vidas.
“Habíamos esperado mi embarazo desde la pandemia, pero pasaba algo que no funcionaba, amado y yo estábamos muy bien, pero Dios todavía no me los quería mandar, hasta que sucedió al doble”, mencionó May Karam, mamá de los cumpleañeros.
“Han cambiado todo al 100 por ciento, ellos llegaron a revolucionar mi vida, son ni- ños súper bien portados, motrices y ya hablan rápido, son muy sociales, como su papá y yo, y además están llenos de amor, pues fueron esperados por nosotros y los que nos rodean”.
Están muy bien, me siento contenta con su desarrollo y crecimiento, además de que aprendo
Al ser de ascendencia libanesa, el valor de la familia es algo que le interesa mucho a May Karam y Amado Harfuch, de modo que, junto a sus seres queridos, quisieron compartir una tarde en honor a los festejados, con piñatas, snacks, dulces y, por supuesto, el tradicional pastel.
“Convivimos mucho en fiestas y comidas, ya que con esto tratamos de celebrar a la vida”, dijo Yovana Karam, tía de los peques, “así como se ve esta reunión de alegre y concurrida, es por el resultado del amor que les tenemos”.
Siempre estaré con ellos; estoy segura de que continuarán creciendo como familia”.
En un ir y venir de niños y niñas, llegó el instante en el que todos se sumaron a entonar “Las Mañanitas”, para, posteriormente, continuar con los abrazos y buenos deseos para May Karam y Amado Harfuch.
“Es increíble, porque los cuatitos y mi gordo, José María, se llevan una semana, por lo que en el embarazo May y yo estuvimos pegadísimas; ahora, compartimos fiestas, y ellos, aunque son pequeños, ya tienen un grupito”, platicó Regina Bautista, “espero que Dios los cuide toda la vida; siempre estaremos cerca para verlos crecer”.
Estoy encantada de esta familia y bendecida por Dios, porque me ha dejado ver a mis bisnietos; que él los cuide, con mucho amor, paz y felicidad”.
