Como muchos otros compatriotas, Eldric Sella, de 24 años, se fue de Venezuela en medio de la severa crisis social y económica que azota al país, con un escenario de inflación alta de cuatro dígitos.
Sella llegó a formar parte de la selección nacional de boxeo de Venezuela a los 18 años, pero fue despedido por falta de recursos. Participó en un torneo invitacional en Trinidad y, ante la situación en su país, decidió quedarse en condición de refugiado.