Con una panorámica a las principales torres de la Capital y el atardecer de fondo, Cinthya Rosales y Elías Abed se casaron por el civil en compañía de sus seres queridos, a 36 pisos de altura.
Si la pasión por los automóviles que ambos comparten no era suficiente para consolidar su relación, fue con la pandemia que se descubrieron profundamente el uno para el otro y decidieron unir sus destinos.
“Coincidimos en el mundo del automovilismo y fueron sus ojitos azules los que me cautivaron, todo inició hace dos años y medio, pero el año pasado formalizamos”, compartió Cinthya, mercadóloga de 30 años.
“Empezamos como amigos, por lo cual desarrollamos un fuerte lazo de confianza y, de repente, estábamos completamente enamorados; el tema de la epidemia, al vivirla juntos, nos hizo conocernos aún más, por eso estamos aquí con muchas ilusiones”.
Del mismo modo, Elías se mostró contento y agradecido de realizar su enlace matrimonial pese a las circunstancias de salud; sin embargo, para él, era sumamente importante consolidar esta etapa.
“No tenía caso seguir posponiéndolo, pues la pandemia seguirá, pero ahora tenemos un nuevo impulso como pareja y planearemos una familia dentro de un matrimonio concreto”, dijo el abogado de 39 años.
Tras firmar el acta y ya como marido y mujer, los cerca de 50 invitados subieron al piso 40 de Sofitel Mexico City Reforma, entre ellos, Emma Abed, la única hermana de los seis que tiene el novio.
“Somos una familia muy unida y, como la única mujer, crecí muy consentida por ellos; siempre les dije que cuando encontraran a su pareja, la respetaran y amaran como si se tratara de mí”, comentó la empresaria textil.
"Estamos muy contentos, Elías es mi tercer hijo y, como es abogado, mi gran confidente”.
Después del banquete, los esposos abrieron la pista con su primer baile nupcial al ritmo de “Llegaste Tú”, de Sofía Reyes.
Los recién casados tendrán, durante una semana, su luna de miel en Cozumel, pues es una isla que ambos conocerán por primera vez
"Con 30 años casado con mi esposa, este día es muy importante para mí, porque se casa mi hija mayor, le deseo mucha felicidad y que nunca falte la empatía”.
Momentos únicos
Durante la tarde, los ahora esposos disfrutaron de instantes memorables.
“Estoy muy contento y me siento afortunado de estar con una mujer como Cinthya, con valores, educación y sueños; deseo comenzar una familia junto a ella”.