A diferencia de otras empresas funerarias, J. García López se comprometió con sus clientes para llegar a donde fuera necesario en corto tiempo, con unidades especiales que debió contratar y con las indicaciones establecidas por las autoridades sanitarias para garantizar homenajes dignos para despedir a los seres queridos de manera segura.
La empresa reaccionó tal y como lo ha hecho en otras situaciones que se han presentado en el país: brindando apoyo y trabajando con la experiencia e infraestructura que le distingue desde hace más de 40 años.
Hoy en día, mantiene los protocolos en todos sus centros de operación y en sus diez Agencias Funerarias, a fin de proteger la salud y seguridad de nuestros colaboradores y de todas aquellas familias que enfrentan la despedida de un ser querido.