Doom Eternal es la secuela directa de Doom de 2016. En esta ocasión, los demonios han invadido la Tierra, arrasando con todo a su paso, sin piedad alguna.
Por ello, Slayer, un temible cazador, debe armarse con todo lo necesario y vestir nuevamente el traje pretor para enfrentarse a la amenaza que proviene de distintas dimensiones. Su misión es impedir, nuevamente, que la humanidad tenga un catastrófico final.
Las mecánicas del juego son prácticamente las mismas que las versiones de otras plataformas. Cuentas con un lanzallamas, que al restablecerse con el tiempo, ayuda a que tus enemigos liberen armadura cuando los quemas; al despedazarlos con la motosierra, que requiere combustible, obtienes municiones; y cuando los destrozas a golpes, los enemigos reponen un poco la salud de Slayer.
El juego fue desarrollado con la tecnología idTech 7, así que es uno de los ports más ambiciosos, pues si conoces Doom, sabrás que el ritmo de la velocidad del juego es bastante alto. Y lo cierto es que los desarrolladores cumplieron bien con esta característica, a pesar de tener que hacer unos cuantos sacrificios.
Cuando Panic Button hizo el port del Doom de 2016 para Nintendo Switch, decidieron limitar al juego a 30 cuadros por segundo (fps), una medida que repitieron para Doom Eternal, además de utilizar una resolución dinámica de 720p. Visualmente, se nota, pero es algo que realmente no tiene tanta relevancia.
Constantemente estás en movimiento y al atacar a tus enemigos, no percibes tanto que el juego no sea tan potente en la calidad visual como en otras plataformas, y lo cierto es que los movimientos de Slayer son muy fluidos, al aplicar el doble salto, al aproximarse rápidamente a los enemigos para golpearlos y saltar para escalar.
El resto de detalles se mantiene en el juego, por ejemplo, la característica de los demonios que conforme les causas daño, poco a poco van perdiendo partes de su cuerpo, hasta que comienzan a brillar y puedes terminar con su sufrimiento con las secuencias sanguinarias e increíbles que son esencia de Doom.
Una de las novedades de la versión de Nintendo Switch es que puedes apuntar tanto con las palancas, como con el giroscopio de los controles. Esta función no está activada por defecto, para ello debes entrar al menú de ajustes, seleccionar “controles” y luego activar el “apuntado por movimiento”.
Si optas por apuntar al inclinar el control, puedes personalizar la experiencia, al modificar la sensibilidad horizontal, vertical, e incluso invertir los movimientos, para que se ajuste a tu modo de jugar.
En lo personal, a mí me incomoda apuntar de esta manera, sobre todo por el ritmo de Doom Eternal que es rápido y los demonios nunca están quietos, así que apuntar bien es algo complicado.
Por otro lado, mis Joy-Con tienen drift así que en el modo portátil uso unos controles Hori Split Pad Pro que carecen de giroscopio, por lo que no puedo jugar de esta manera. La alternativa es usar el Pro Controller, pero para jugar Demon Eternal en Switch, prefiero la experiencia portátil.
Es un gran logro que id Software y Panic Button pudieran entregar una experiencia muy similar a la que ofrece Doom Eternal en las plataformas que son más potentes que Nintendo Switch. El ritmo ágil, e incluso el grandioso doblaje en español latino se mantiene, lo cual agradezco mucho.
Por si fuera poco, esta versión mantiene a Battlemode, la experiencia multijugador en el que dos gamers controlan a demonios para enfrentarse a un tercer jugador que controla al Slayer, mientras se enfrentan en combates de hasta cinco rondas. Claro, para esta función requieres la suscripción de Nintendo Switch Online, pero lo vale.
Al igual que el juego original, la banda sonora es increíble. Para prueba de ello, te comparto esto:
Sin duda, visualmente no disfrutas la gran calidad que hay en otras plataformas, pues incluso cuando los demonios están algo alejados, se aprecian un tanto pixelados.
Por otro lado, The Ancient Gods: Part One no está disponible por ahora para esta versión, algo triste, pues creo que hubiese sido bueno que fuera una edición definitiva que contara con el DLC, pues el juego se vende con el precio de un título totalmente nuevo.
No hay edición física de Doom Eternal para Switch y el juego pesa 18.8GB, así que ocupará bastante memoria de tu consola, algo a considerar.
Además, sería bueno que el juego contara con cross play, para jugar Battlemode con amigos que usen otras consolas, o cross progression, para que puedas continuar con la aventura con esta experiencia portátil.
La razón fundamental para adquirirlo en Switch es la oportunidad de disfrutar a Doom Eternal en donde sea que te encuentres, pues a pesar de las limitaciones gráficas, la jugabilidad se mantiene muy fiel para darte buenas horas de diversión. Sin duda en eso cumple con la complicada misión.
Por otro lado, si ya lo jugaste y no lo has retomado desde hace meses, la verdad es que no tiene sentido que lo adquieras, pues en cuanto a contenido no tiene novedades y el precio es algo elevado a comparación de las versiones para otras consolas y PC.
Doom Eternal en Nintendo Switch
$1,545, para Nintendo Switch
Clasificación: M
Calificación: 4/5 🌟🌟🌟🌟
Desarrollador: id Software y Panic Button
Distribuidor: Bethesda
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Información y edición: Axel Romero
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