Los acontecimientos del juego se desarrollan en Cracovia, Polonia, a finales de la década de los 90.
Después de sufrir una terrible pérdida, la joven Marianne recibe una misteriosa llamada de un hombre que afirma conocerla y que la lleva a explorar el Hotel Niwa, que fue abandonado desde hace varios años, después de que ocurriera una tragedia colosal.
La cuestión es que Marianne no es alguien convencional, pues tiene habilidades que le permiten ver más allá para interactuar con el mundo espiritual, una realidad alterna en la que las pesadillas son tangibles y los espíritus vagan sin descanso en busca de ayuda, o de alguien que pague por su sufrimiento.
La premisa del juego consiste en experimentar una perspectiva diferente al explorar el mundo espiritual que Marianne puede ver. Cuando atraviesa zonas en las que ocurrió algo terrible, Marianne sufre de dolores de cabeza que la “llevan” del mundo material al mundo espiritual.
Al avanzar, habrá momentos en el que experimentes las dos realidades simultáneamente; en otras ocasiones, Marianne no podrá avanzar en el mundo material, así que su espíritu debe salir de su cuerpo para investigar en el mundo espiritual la forma de progresar. La condición es que no puede estar mucho tiempo en ese estado, ya que puede ser consumida por la oscuridad.
Más adelante, Marianne encontrará la forma de poder entrar completamente al mundo espiritual a través de los espejos, que le sirven como portales para llegar a áreas de limitado acceso.
La cámara que implementaron los desarrolladores en The Medium es semi fija, es decir que aunque permanezca situada en puntos específicos de las habitaciones y pasillos que recorres, girará ligeramente, según a donde te dirijas. Esto se debe a dos razones: la primera es que, artísticamente, querían lograr una experiencia similar a los juegos de horror clásicos; y por otro lado, descubrieron que muchos jugadores se mareaban al mover libremente la cámara cuando exploraban en las dos realidades simultáneamente.
Aunque los escenarios mantienen su esencia en ambas realidades, como en la distribución de los muros, la interacción con los objetos suele ser distinta.
Por ejemplo, en una parte del juego subes un elevador, pero se atasca, así que debes salir para restablecer la energía.
Aquí es en donde Marianne hace relucir otra habilidad, pues al encontrar pozos de luz, en los que las personas atesoraron algo muy importante cuando estuvieron vivas, puede recargarse con energía espiritual, que puede utilizar para activar puertas, o incluso para crear un campo de fuerza luminoso que la protege de las polillas que acechan en algunos pasillos.
El nivel de energía espiritual es indicado a través del brazo de la Marianne del mundo espiritual, que es envuelto por un brillo blanco. Conforme la protagonista crea escudos protectores y activa puertas, esta energía se consume, y debe regresar a los pozos de luz para recargarse.
La luz es un elemento clave. Mientras Marianne investiga el Hotel Niwa para encontrar pistas que la guíen hacia el hombre que la llamó, se encontrará con objetos que muestran una marca luminosa. Esto significa que hay ecos en su interior, recuerdos que las personas dejaron atrás.
También hay otra representación de recuerdos. De vez en cuando, encontrarás fragmentos de las siluetas de algunos personajes, que debes reconstruir al girar la palanca hasta llegar a la posición adecuada. Estas memorias dan un poco de contexto a la historia.
En el juego, la protagonista también tendrá que resolver algunos puzzles para avanzar e incluso llegará a cuartos oscuros, en los que podrá revelar fotografías. Así, Marianne poco a poco reconstruye lo que ocurrió en el Hotel Niwa y descubre por qué la motivaron a ir ahí.
Pero su estancia no es vacacional. Aunque hay espíritus que necesitan ayuda, hay otros seres oscuros que han sido corrompidos, y que harán lo necesario con tal de consumir la luz de Marianne, así que en algunos escenarios hay avanzar sigilosamente o correr desesperadamente.
La dinámica de cambiar entre las realidades está muy bien aplicada. Pensé que sería algo muy conflictivo y que alteraría la calidad visual al mostrar el mundo real y el espiritual simultáneamente, pero el desempeño del juego es muy bueno en Series X, incluso soporta Ray Tracing, para que la iluminación y los reflejos tengan un efecto más realista y detallado. En Series S también tuve una buena experiencia, aunque las caídas de frames fueron más frecuentes.
Es interesante cambiar entre un mundo y otro para resolver los acertijos, aunque no tienen una dificultad elevada, te da mucha satisfacción encontrar la forma de avanzar.
Además, artísticamente el juego es una verdadera joya. Los desarrolladores afirman que se inspiraron en las obras del pintor polaco Zdzisław Beksiński para crear el tenebroso mundo espiritual.
Y para crear una atmósfera profunda de horror psicológico, la banda sonora está compuesta por Akira Yamaoka, el compositor de varias entregas de Sillent Hill, y Arkadiusz Reikowski, quien anteriormente ha participado en los juegos de Blair Witch, Observer y Layers of Fear 2, entre otros.
La música, las voces de los actores (aunque no hay doblaje latino) y efectos de sonido hacen que valga la pena jugar con audífonos.
Aunque hay un enemigo que frecuentemente te persigue, como Nemesis en Resident Evil 3, hay otros entes malignos que tuvieron un gran potencial que se sintió desperdiciado. Después de recorrer laberintos misteriosos que yacen en lo más oscuro de algunos personajes, cuando crees que al fin enfrentarás a sus monstruos internos, se activa una cinemática en la que Marianne los derrota. Así, sin más.
Por otro lado, hay escenarios que se sienten muy grandes sin necesidad. Por ejemplo, en una parte recorres una alberca seca, bastante amplia. Ahí no hay enemigos, solo encuentras pistas para revelar un poco más de la historia, pero de una manera muy sencilla.
Es como si estas habitaciones amplias o pasillos extensos hubiesen sido diseñados para alargar un poco más el juego sin una buena justificación, pues aunque hay puertas que puedes ver en algunas zonas, no puedes interactuar con varias de ellas.
Por otro lado, hay acciones repetitivas que son algo molestas, como tener que cortar retazos de piel que te bloquean el paso en el mundo espiritual. No es algo que dé miedo, o que implique un reto, solo te quita tiempo.
La narrativa se siente algo enredada. Aunque no es tan difícil entender lo que ocurre, las historias de los personajes giran abruptamente para plantearte situaciones muy oscuras, que concluyen de maneras muy simples.
Así como Bloober Team se atrevió a proponer una experiencia distinta al empezar a jugar en ambas realidades, también hubiera concluido con el mismo impulso. No te contaré el final, pero me pareció que el estudio tomó el camino menos arriesgado. Seguramente, varios quedarán inconformes con esto.
Sería bueno contar con un sistema de decisiones que determine finales alternativos, según lo que hagas a lo largo del juego. Además de enriquecer la narrativa, esto te daría una buena excusa para volver a jugar, de lo contrario, tal vez tu única razón para retomar a The Medium sea encontrar recuerdos o notas que hayas pasado por alto.
Y es que el juego no es tan largo. Me tomó casi 10 horas terminarlo, al darme el tiempo suficiente para investigar cada rincón de los escenarios.
The Medium tiene una fórmula compuesta por elementos muy interesantes, como la interacción entre el mundo material y el espiritual, que enriquece mucho la exploración y el misterio en la historia. Además, la música, el arte de los escenarios y los actores que prestan sus voces a los personajes dan como resultado una experiencia llena de vida.
Aunque puede que termines el juego tranquilamente durante el fin de semana, su precio lo hace muy atractivo, además, está disponible en Xbox Game Pass, así que no hay tantas excusas para no darle una oportunidad.
Sin embargo, a diferencia de Marianne, difícilmente sentirás que tu alma se sale de tu cuerpo al jugar, pues The Medium no es el juego más terrorífico. Más bien, es una experiencia de suspenso, de horror psicológico, así que si buscas un juego que te espante o se sienta como un survival horror, puede que no sea para ti.
The Medium
$880, para Xbox Series X, Series S y PC
Clasificación: M
Calificación: 4/5 🌟🌟🌟🌟
Desarrollador: Bloober Team
Distribuidor: Bloober Team S.A.
También te podría interesar:
- #DomingoGamer: Doom Eternal en Nintendo Switch
- #DomingoGamer: Scott Pilgrim Vs. The World: The Game – Complete Edition
- #DomingoGamer: La nueva temporada de Rocket League
- #DomingoGamer: Fitness Boxing 2
- #DomingoGamer: La nueva temporada de Fortnite
- #DomingoGamer: Cyberpunk 2077
- #DomingoGamer – Call of Duty: Black Ops Cold War
Información y edición: Axel Romero
Síguenos para más noticias de tecnología:
: @ReformaGadgets
: reformagadgets