EL PLAGIO DE ESTHELA

Esthela Guadalupe Estrada Ávila, secuestrada el 29 de marzo.

Tres años después de la desaparición de su hijo en Sonora, Azulema Estrada Ávila padece otro dolor: el secuestro de su hija el pasado 29 de marzo en Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco.

“Ella es mi hija, si la has visto, no te calles, ya son más de 48 horas sin saber nada, sus hijas la esperan en casa”, escribió el primero de abril la integrante del Colectivo Luz de Esperanza.

Se trata de Esthela Guadalupe Estrada Ávila, de 30 años de edad, a quien un grupo armado se llevó por la fuerza en el Fraccionamiento Santa Fe.

El hecho ocurrió cerca de las 23:30 horas, delante de su hija de 11 años. La menor también presenció, hace tres años, la desaparición de su tío Iván Estrada Ávila, en Guaymas, Sonora.

'NO PUEDO EXPLICAR EL DOLOR'

“¡No estás sola, no estás sola, no estás sola!”, gritaron manifestantes en apoyo a Azulema Estrada Ávila.

Familiares de la mujer e integrantes del Colectivo Luz de Esperanza protestaron el 31 de marzo afuera de la Fiscalía Especial de Personas Desaparecidas, en Calzada Independencia y Hospital, en Guadalajara, por el secuestro de Esthela.

La madre buscadora pidió hablar con la Fiscal Blanca Trujillo Cuevas y advirtió que, si no le daban respuesta, cerraría la calzada.

Aseguró que detectaron en cámaras el vehículo usado por los criminales para llevarse a su hija y que esperaban la sábana de llamadas.

“Quiero pronta respuesta de ti, Blanca Trujillo, para poder dar con el paradero inmediatamente de mi hija”, dijo.

No te puedo explicar ahorita el dolor que siento, si la primera vez estaba destrozada y no he parado de buscar a mi hijo, ahorita con este doble suceso que me está pasando no tengo palabras para describir cómo me siento, porque nadie sabe, más que todas mis compañeras que estamos pasando por el mismo dolor".

MADRE E HIJA ACTIVISTAS

Esthela también es integrante del Colectivo de familiares de personas desaparecidas “Luz de Esperanza” en Jalisco.

Junto con su madre, emprendió labores de búsqueda a raíz de la desaparición de su hermano en el 2020.

Jesús Peña Palacios, representante Adjunto de la ONU-DH en México, consideró preocupante la desaparición de Esthela a pesar de contar con medidas de protección.

“Esto nos habla del difícil contexto en el que deben llevar a cabo su labor quienes defienden los derechos humanos. La ausencia de adecuadas medidas preventivas y de protección puede derivar en el incumplimiento de la obligación de protección a las personas defensoras”, señaló.

LA DESAPARICIÓN DE IVÁN

Iván Alfredo Estrada Ávila desapareció el 3 de febrero de 2020 en Guaymas, Sonora. Desde entonces, su madre empezó su búsqueda y se integró al Colectivo Luz de Esperanza pese a la distancia que separa Guadalajara de Sonora.

En sus redes sociales, la buscadora tiene imágenes de su hijo con mensajes en los que expresa lo mucho que le duele su ausencia.

"A casi tres años de que te llevaron a la mala de tu casa, dejando a tu familia con el corazón partido en mil pedazos, tú que te lo llevaste sin su consentimiento, apiádate de su familia que día a día sufre su ausencia", posteó su madre el pasado 2 de febrero.
"No busco culpables, nada más quiero recuperarlo y si ya no está con vida poder darle el descanso que él necesita. Hijo mío, duele mucho tu ausencia. Cada día que pasa se hace más pesado el respirar y caminar, todos me ven fuerte, pero solamente yo sé cómo me siento".
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