Pareciera que fue ayer cuando Atlas debutó a los 19 años un habilidoso zurdito que obedece al nombre de Andrés Guardado (28 de septiembre, 1986).
De estampa particular: menudito, bajito, y de inconfundible cabello rizado que le valieron para recibir el mote de “El Principito”, con autoría del narrador Luis Omar Tapia por su parecido al personaje del libro con el mismo nombre.
La calidad de Andrés por la banda izquierda de los Zorros inmediatamente llamó la atención no sólo del futbol mexicano, sino a nivel internacional.
Cerca de ser merengue
A Guardado le bastaron dos años en la Primera División para ser exportado al Viejo Continente y no volver más.
Sin embargo, pudo hacerlo antes cuando el Real Madrid puso sus ojos en él para intentar llevarlo al equipo filial del Real Madrid Castilla, donde el club merengue recluta a los futbolistas jóvenes con la intención de nutrirse más adelante de esos jugadores.
“Yo jugaba de lateral izquierdo y el Madrid buscaba un sustituto de Roberto Carlos. Les llamé la atención en el Mundial y la idea era jugar en el Castilla y entrenar con el primer equipo, para ir pasando poco a poco. Yo estaba como loco por ir, pero el Atlas vio que yo había jugado un Mundial y no me iba a dejar ir para jugar en el Castilla. Aunque fuera el Madrid, no lo veían. También los entiendo, querían una venta importante, que llegó un año después con la oferta del Deportivo”, confesó Guardado a El País.
Conquista europea
Guardado finalmente fue fichado en 2007 con el Deportivo La Coruña, de 2007 a 2012 jugó en el club gallego, pasó al Valencia, después emigró al futbol alemán con el Bayer Leverkusen.
Posteriormente viajó a Holanda con el PSV Eindhoven donde se convirtió en uno de los consentidos.
Desde el 2017 a la actualidad, a su regreso a España se ha consolidado como un elemento importante en el Betis.
Revancha en España
“(Fichar por el Betis) fue un tema de revancha personal. Me fui del Valencia con un estatus que no me gustó. Jugué muchos partidos allí, pero de lateral, no había sido tan protagonista como en el Deportivo. Siento que perdí el crédito que había ganado en el Deportivo más allá de que jugara bastante en Valencia. En Alemania con el Leverkusen no me fue bien y terminé en Holanda. Es una Liga menor, pero triunfé. Pero cuando salió la oportunidad de jugar en el Betis me sentía maduro y quería demostrarme a mí mismo que todavía podía jugar con 30 años con los mejores y en la Liga española”, decía el “Principito”.
Rey de Copas
En su palmarés presume un título de la Segunda División y una Copa Intertoto de la UEFA con La Coruña, dos Ligas y dos Supercopas en Holanda; además de tres Copa Oro y una Copa Concacaf con la Selección Mexicana, con la que buscará disputar su quinto Mundial en Qatar 2022.
En la víspera de su cumpleaños 35, Andrés Guardado ha cumplido 350 partidos en la Primera División de Europa.
Un “Principito” que comienza a ser “Rey”.