En Chiapas, los vuelos llegan al Aeropuerto de Tapachula, y, custodiados por la Guardia Nacional, el INM traslada a los deportados hasta la zona de Talismán, en el Municipio de Tuxtla Chico, donde finalmente los abandona pidiéndoles que crucen a pie el puente fronterizo hacia Guatemala, sin que autoridades de este país tengan conocimiento.