Después de 23 años, Cruz Azul por fin celebra el título de Liga. ¡Campeones!

#Rómpela

Édgar Contreras
@ContrerasCANCHA
 

Así arrancó la mañana del 30 de mayo de 2021, con un hashtag que resumía el deseo de la afición de Cruz Azul por ver a su equipo campeón.

Esta fecha estaré presente en la memoria de cada cruzazulino, que por fin celebra un título de Liga, después de 23 años.

La Máquina exorcizó demonios y cazó a sus fantasmas. Se acabó la época de las cruzazuleadas y de las dolorosas derrotas. El triunfo en la Final del Torneo Guardianes 2021 contra Santos marca el desenlace de la era más oscura del club, ya sin Billy Álvarez en los controles, y el comienzo de una era prometedora, por la calidad en la plantilla.

Durante todo la Liguilla, el plantel transportó una cruz de cemento, no tan pesada como la losa emocional, pero la cual simbolizaba el regreso a los orígenes, esos inicios de gloria de un club que nació grande, pero al que se le había olvidado dicho concepto.

Cruz Azul y campeón hoy son sinónimos.

Del infierno a la Gloria

Cruz Azul bajó hasta el infierno antes de gozar la gloria.

El ridículo al perder por primera vez en la historia de las Liguillas una ventaja de 4-0 tocó las fibras más profundas de cada cruzazulino.

Con la moral por los suelos, protagonistas de los memes más divertidos y crueles, La Máquina tuvo que resurgir.

La llegada de Álvaro Dávila a la presidencia le ha dado frescura al club. La apuesta por el técnico Juan Reynoso parecía otro salto al vacío, pero las apariencias engañan.

El peruano se convirtió en el primero en la historia de Cruz Azul en ser campeón como jugador y técnico, no sin antes picar mucha piedra.

El terrible inicio

Juan Reynoso no cayó con el pie derecho en la que fuera su casa.

Quizá la gente minimizaba al peruano por llegar al Cruz Azul tras dirigir a un modesto club como el Puebla.

Lo cierto es que las derrotas contra Santos y frente a La Franja en poco ayudaban a la estabilidad del proyecto.

En Cruz Azul, la directiva no perdió la cabeza. Reynoso reconoció que requería tiempo y que las victorias llegarían, quizá al principio sin un futbol espectacular, pero suficiente para poner las bases de un funcionamiento sólido.

Desde ese momento, La Máquina no tuvo freno.

Las 12 victorias consecutivas

Pachuca, Querétaro, Necaxa, Tigres, Toluca, León, Mazatlán, Pumas, Monterrey, Atlas, Juárez y Chivas tuvieron como verdugo a Cruz Azul, en la racha de 12 victorias consecutivas del equipo.

La Máquina igualó el impresionante récord de León en Torneos Cortos y del Necaxa cuando había temporada larga.

Se cruzó el América para amargarle la marca en solitario, tras aquel 1-1 en el Azteca. Como sea, el cuadro cementero no perdió nuevamente en el resto de la Fase Regular. 

Encuentro con los fantasmas

Cruz Azul muchas veces ha sido el amo y señor en Fase Regular, pero siempre se topa con sus demonios en la Liguilla.

Así parecía ocurrir nuevamente luego de la caída en el juego de ida de los Cuartos de Final, 2-1 contra Toluca, más allá de que muchos hayan culpado al arbitraje por el penal concedido a los Diablos.

En el duelo de vuelta, La Máquina tuvo la serenidad emocional para remontar, y selló el pase a las Semifinales gracias al triunfo 3-1 (4-3 global).

La herencia del ídolo

Christian Giménez intentó, hasta el cansancio, darle el título a la afición de Cruz Azul.

Uno de los grandes ídolos en la historia cementera se fue del club con las manos vacías en la Liga.

Lo que es la vida, su hijo Santiago hoy es artífice del título.

El llamado “Chaquito”, a sus 20 años, es campeón con La Máquina. Para la historia quedará aquel gol en la Semifinal contra Pachuca, tanto que le dio al equipo la tranquilidad para consumar el pase al duelo por el título.

Solo que una instancia anterior también marcó el tercer tanto, en aquel triunfo contra el Toluca.

Como sea, el apellido Giménez es uno de los más históricos en Cruz Azul.