El primer viaje que Daniela Barroso y David Sánchez hicieron como novios fue a Oaxaca, de donde quedaron enamorados de su gastronomía, paisajes y su gente, por lo que prometieron casarse en ese Estado.
Casi tres años después cumplieron su juramento, por lo que acompañados de 144 invitados la pareja cristalizó su sueño en el Templo San Matías Jalatlaco, para después trasladarse al salón La Fábrica Patio y disfrutar de una fiesta completamente mexicana.
“Fue el día más feliz de mi vida, porque además de lo alegres que nosotros estábamos, la energía de las personas que estaban ahí fue súper bonita, todos compartían nuestra felicidad y eso se sentía también”, expresó la licenciada en Administración Turística por la Anáhuac México Sur.
Ellos se conocieron en una comida de un amigo en común, pero David iba con una chava que Daniela pensó que era su novia, por lo que no hubo un acercamiento hasta que aclararon la situación y él la invitó a salir.
“Le entregué el anillo en julio del año pasado en el departamento en el que ahora vivimos”, compartió el novio, quien estudió Finanzas en el Tec de Monterrey Campus Santa Fe.
“Lo que mas admiro de ella es su buena actitud en la vida y la capacidad de generar tanto cariño a su alrededor”.
Para abrir pista, los recién casados bailaron la canción “Eres”, de José María Napoleón, lo cual dió pie a que los presentes subieran con ellos para juntos comenzar con el ambiente de la fiesta.
De pre honey moon, los enamorados pasaron unos días en Cancún, ya que cuando termine la pandemia volarán a distintos puntos de Italia.
De canapés, los invitados comieron cazuelas de aguacate con chapulines, flores de calabaza con requesón y memelitas. Para la comida, sirvieron sopa de tortilla y crema de chicharrón, barbacoa, tortillas hechas a mano y, de postre, nieve de mango y coco o flan con chocolate oaxaqueño.