Nos faltan policías
Ningún Municipio del Área Metropolitana de Guadalajara, y por ende tampoco la zona metropolitana en su conjunto, tienen el estándar de 2.8 policías por cada mil habitantes que sugiere la ONU para hacer frente a los criminales.
Los que más se acercan son los municipios de Guadalajara y Zapopan, en donde hay 1.8 policías por cada mil personas, ambos municipios se han preocupado por incrementar su plantilla, pero ni así ha sido suficiente.
En la Zona Metropolitana donde más faltan policías es en Ixtlahuacán de los Membrillos, apenas hay 0.8 por cada mil habitantes; le siguen Juanacatlán y El Salto, en ambos la tasa es de 0.9 uniformados.
Quienes vienen de la Ciudad de México suelen asombrarse por la falta de policías y patrullas en las calles, pues ellos están acostumbrados a convivir con ello. En la capital la tasa es de 4.2 por cada mil habitantes, la única del país por encima de la sugerencia de la ONU.
No le pagamos lo justo a los policías que tenemos
¿Cuánto le damos de salario a quien arriesga su vida para protegernos? Marycruz, como policía segundo en la Comisaría de El Salto, recibía un sueldo mensual de 12 mil 343 pesos, según transparencia del Municipio. El salario de un policía de línea, el primer escalón de un miembro de comisaría, es de 8 mil 574 pesos.
Los gobiernos saben que nuestros policías no reciben la remuneración suficiente por la labor que desempeñan, lo dicen las propuestas que hacen para intentar mejorar esos salarios, una de ellas es la homologación propuesta por el Gobierno del Estado desde 2019.
Pero dicha homologación no es más que un bono con fecha de caducidad, 2024, para que los uniformados de al menos las 9 comisarías municipales reciban alrededor de 18 mil pesos, y que no incide en una mejora en el resto de sus prestaciones.
Pagarle lo justo a los uniformados sería un incentivo para tener más policías y dignificaría la labor que desempeñan, con lo que realizarían un mejor trabajo en las calles, han señalado especialistas en seguridad.
No les damos oportunidades de crecimiento a nuestros policías
En teoría hay todo un Sistema diseñado para que un uniformado ascienda, reciba reconocimientos y mejores condiciones de trabajo según su antigüedad y desempeño en la corporación. En la práctica no siempre funciona.
Grupo REFORMA publicó que hay varias partes de los reglamentos del Servicio Profesional de Carrera Policial que no se aplican en las comisarías, y en Tonalá, por ejemplo, no se transparenta la trayectoria académica del primero y el segundo al mando, que en teoría deberían tener licenciatura y especialidades.
En Guadalajara, este medio detectó a 3 gendarmes con nombramiento de oficiales y 4 con nombramiento de suboficiales no cumplían con los requisitos de antigüedad para tener dichos nombramientos, y algunos ni siquiera demostraron experiencia en su currículum antes de entrar a la corporación.
Según especialistas, sin un piso parejo para los uniformados, las corporaciones caen en amiguismos y otras prácticas fuera de reglamento para dar nombramientos, lo que afecta a la toma de decisiones en seguridad.
No sancionamos a los agresores de los policías
En Jalisco los policías han sido desaparecidos, privados de su libertad y luego asesinados, o liberados vivos pero bajo amenaza. Y quienes realizan estos crímenes siguen en las calles.
En la actual administración suman 65 policías e integrantes de corporaciones asesinados, de ellos la corporación con más víctimas es la Fiscalía, precisamente la que debe perseguir a los responsables de los crímenes. En Fiscalía ha habido de 2018 a julio de 2021 13 agentes caídos, entre ellos el Fiscal Regional Gonzalo Huitrón, el 26 de julio de 2019.
Ni en el caso de Huitrón ni en el resto de las víctimas de la Fiscalía la institución ha dado avances de las investigaciones ni ha anunciado capturas de los sospechosos y la novedad es cuando sí ocurre una captura, como en el caso de Abelardo, el Policía de Tlajomulco, por el que hubo 4 detenidos, ya en prisión preventiva un año mientras el caso sigue.
La impunidad en los homicidios dolosos en general alcanzó en Jalisco el 86.2 por ciento, lo que significa que solo en el 13.8 por ciento de los casos se sanciona a los criminales, según un estudio de Causa en Común. De ese tamaño es la falta de verdad y justicia que la Fiscalía debe comenzar a resolver.
Información: Enrique Osorio