La Selección Mexicana tiene una opción más en la portería con David Ochoa (16 de enero de 2001, Oxnard, California, Estados Unidos), un arquero que sufrió bullying por parte de sus compañeros en las Fuerzas Básicas de las Chivas.

Hijo de padres mexicanos, actualmente milita en el Real Salt Lake, de la MLS, y se ha decantado por defender al Tricolor.

En una publicación para The Players’ Tribune, el portero se sinceró y contó su historia para alcanzar su objetivo de militar en el Rebaño.

De familia rojiblanca

“Mi papá ama a las Chivas. Mi abuelo también le va a las Chivas. Podríamos seguir así con todo el árbol genealógico de la familia, porque son todos chivistas.
Así que naturalmente mi sueño era jugar para Chivas. Eso, y también jugar para la selección mexicana”, compartió.

A pesar de los colores contrarios, la inspiración y admiración de David era para el americanista Memo Ochoa.

Después de destacar en un torneo internacional juvenil se robó las miradas de los equipos estadounidenses Galaxy y Real Salt Lake, y en México de Chivas y del Monterrey.

No había duda. Su elección se inclinaba por el Guadalajara y el comienzo de un sueño se cumpliría desde los 14 años.

Llegó a la Ciudad, acompañado por el orgullo que sentía toda su familia al verlo jugar en su equipo favorito.

En el día a día, su sueño se tornaba en pesadilla por el trato recibido de sus compañeros.

Fue víctima de bullying en las básicas del Rebaño

“Era muy duro estar con los niños mexicanos en Chivas. Tenía pasaporte mexicano, parecía mexicano, pero como había venido de los Estados Unidos, yo siempre era el gringo. Para ellos, era el niño americano malcriado que tenía todo a disposición. En cada entrenamiento me molestaban con todo tipo de comentarios sobre lo fácil que era mi vida en Oxnard. Y cada vez que me equivocaba en alguna palabra —porque mi español no era tan bueno como el de ellos— me lo echaban en cara: ¡Pinche gringo!”, recuerda.

Esa situación era un duro golpe para él porque en ambos países le hacían sentir que no pertenecía a uno.

“Yo lo odiaba. Lo odiaba muchísimo. Odiaba ser siempre el diferente. En Estados Unidos, yo era ‘The Mexican’. En México era ‘El gringo'”, añade.

A pesar de ello, en la cancha destacaba como uno de los mejores y era seleccionado nacional juvenil, hasta que la afectación cada vez era mayor.

En la academia del Real Salt Lake retomó la confianza

“Estuve ocho meses allí sin ningún amigo con quien poder platicar. Y cuando tienes 15 años, necesitas amigos. Necesitas socializar. Quieres salir y ver lo que la ciudad tiene para ofrecer, ¿cierto? Y no quedarte en tu habitación mirando el teléfono todo el día.

“Esa era más o menos mi rutina de todos los días. Después empezaba el entrenamiento y ahí seguían los comentarios. Yo me reía, pero en el fondo, me dolían. A veces, por las noches, intentando dormir, pensaba: ¿Qué es lo que tengo que hacer para mostrarles a estos chavos que soy igual que ellos?”.

El 'Tata' Martino ha puesto sus ojos en él

Sentirse de esa manera le generó inseguridad. David dudaba si realmente podría dedicarse y triunfar en el futbol, porque de lo contrario, le esperaba trabajar en la construcción como su padre.

“No les dije nada a mis padres sobre el bullying. Mi papá me hubiera dicho que me hiciera fuerte, y mi mamá iba a sentirse mal por mí y pedirme que regresara a casa. Pero Chivas era mi equipo y también jugaba en las selecciones juveniles de México, así que sentía que los sueños estaban cerca de hacerse realidad. No podía perder esa oportunidad”.

“Lamentablemente, nunca funcionó porque algunas reglas de la FIFA me impedían jugar en las fuerzas básicas mexicanas siendo menor. Así que regresé a los Estados Unidos, y por suerte, otra puerta se me abrió: así llegué al Real Salt Lake Academy. De pronto, la mala experiencia de Chivas se había ido por completo. Nuevamente me encontré amando la vida”, reconoce.

David Ochoa fue llamado por Gerardo “Tata” Martino en la preparación para la Copa Oro y se encuentra a disposición de futuras convocatorias.

Redacción: Citlalli Medina
Fotos: Instagram David Ochoa
Información: T
he Players’ Tribune