+ En la década de los 60, “El Inge” tenía problemas de salud por estrés laboral, por lo que se le aconsejó que buscara un pasatiempo. Fue entonces que su amigo Pepe Garralda le recomendó el golf.
+ Al inicio, este deporte no le atrajo mucho al “Tío Quecho”. “¿No prefiere andar pegándole a la cacariza que estar toda su vida de píldora?”, le preguntó su compadre. Y fue entonces que don Sergio comenzó a jugar más seguido, aunque seguía sin encantarle este hobby.
+ Con el tiempo se le fue haciendo rutina y se dio cuenta de que su salud mejoraba.
+ Tuvo que dejar el golf por poco más de dos años, debido a unos problemas con su espalda, pero sus ganas por regresar a este deporte ya eran muchas.
+ Cuando le dieron permiso sus médicos, una de sus doctoras le recomendó empezar a jugar uno o dos hoyos, y con el tiempo ir avanzando poco a poco.
+ Gracias a este consejo, los calambres que sufría don Sergio fueron desapareciendo.
+ A la fecha ha jugado en más de 160 campos de golf en México, Estados Unidos y Centroamérica.
+ Actualmente está en búsqueda de su tercer hole in one.
+ Don Sergio se ha convertido en una persona muy querida y apreciada en la comunidad de golf, particularmente en Las Cañadas Country Club y en el condominio Rancho Contento, sus bases.