Macario (1960)

Esta película clásica de 1960 dirigida por Roberto Gavaldón fue la primera producción mexicana en ser nominada a los Oscar a la Mejor Película en Lengua Extranjera. La historia se basa en la novela del mismo nombre, del autor alemán B. Traven, quien pasó muchos años de su vida y murió en México. Macario (interpretado por el icónico actor Ignacio López Tarso) es un humilde indígena que sueña con comerse un pavo entero solo, pero es puesto a prueba por el diablo, Dios y la muerte cuando le piden que comparta su ansiada comida con ellos. Filmada con una impresionante cinematografía en blanco y negro por el legendario Gabriel Figueroa, la historia tiene lugar la noche anterior al Día de Muertos.

Hasta los Huesos (2001)

El cortometraje stop-motion de René Castillo fue una sensación en decenas de festivales internacionales, incluido el Festival Internacional de Cine de Animación de Annecy, el evento de animación más famoso del mundo. Con una gran cantidad de títeres hechos a mano, esta animación mexicana mezcla la comedia con un profundo anhelo. Después de ser enterrado vivo, un hombre se hunde en el inframundo poblado por esqueletos revolucionarios que beben en exceso. Allí, es testigo de la inquietante interpretación de La Catrina de “La Llorona” en la voz de la cantante Eugenia León, y descubre que la otra vida podría no ser tan mala.

La Leyenda de la Nahuala (2007)

La pionera empresa mexicana de animación Ánima Estudios inició su franquicia más popular con La Leyenda de la Nahuala de 2007, que ha dado lugar a varias secuelas: La Leyenda de La Llorona, La Leyenda de las Momias de Guanajuato, La Leyenda del Chupacabras y la más reciente La Leyenda del Charro Negro. Todos ellos miran un cuento popular espeluznante desde un punto de vista familiar. La Nahuala está ambientada en el Día de Muertos en 1807, cuando un joven héroe, Leo, intenta evitar que una antigua bruja recolecte almas durante la festividad impulsada espiritualmente y se vuelva más poderosa. Las calaveras de azúcar y los alebrijes cobran vida y se convierten en sus compinches en esta búsqueda colonial.

De un Jalón hasta el Panteón (2009)

Este cortometraje animado dibujado a mano y dirigido por Enrique Sañudo como su proyecto de tesis para la Universidad Autónoma Metropolitana Xochimilco (UAM) en la Ciudad de México es una divertida versión de la Tierra de los Muertos. Un padre mexicano que todos los días está viendo la televisión cuando se duerme y se despierta en una cantina llena de esqueletos. Allí conoce a Carlos Calavera, su guía por este reino que habla con frases coloquiales. Carlos le presenta al nuevo invitado, que ahora es un esqueleto, a El Santo, Frida y Cantinflas. El corto continúa con un enérgico baile entre el protagonista y La Catrina. En 2009, el cortometraje se presentó en algunos de los festivales más importantes de México y América Latina, incluido el Festival Internacional de Cine de Morelia.

Día de Muertos (2012)

Si bien la animación es sin mucho detalle ni movimiento, los tres codirectores latinos detrás de este corto (Ana Sifuentes, Adrián Cavazos y Sofía Avilés) logran plasmar la esencia de la tradición familiar: homenajear a quienes ya no están con nosotros. Una niña se despierta en medio de la noche y da un paseo con su abuela por un pasaje iluminado por velas flotantes que conduce a una ofrenda. Una vez que llegan allí, se revela un giro.

Día de los Muertos (2013)

Realizado por tres estudiantes del Ringling College of Art and Design (Ashley Graham, Kate Reynolds y Lindsey St. Pierr), este animado cortometraje generado por computadora comienza en un cementerio cuando una niña llora a su madre recientemente fallecida. Al encontrar una flor azul mágica, la joven protagonista es transportada a una tierra con esqueletos amistosos, pan dulce interminable y música de mariachi. Un esqueleto femenino jovial le muestra los alrededores e incluso usa uno de sus huesos para romper una piñata antes de un cierre emotivo.

El Libro de la Vida (2014)

El animador mexicano Jorge Gutiérrez, quien creció en Tijuana y se graduó de CalArts, vio cómo uno de sus mayores sueños se hizo realidad cuando Guillermo del Toro se incorporó como productor de su ópera prima El Libro de la Vida. Su interpretación del Día de Muertos exaltó su visión estilística única a través de personajes que se asemejan a figuras de madera talladas a mano, y se centra en un triángulo amoroso orquestado por las deidades del poder La Muerte (Kate del Castillo), que gobierna la Tierra de los Recordados, y Xibalba (Ron Perlman), su contraparte en la Tierra de los Olvidados. Diego Luna le da voz al héroe musical Manolo Sánchez, quien incluso después de la muerte lucha por regresar con su querida María (Zoe Saldana). El trabajo de Gutiérrez recibió una nominación al Globo de Oro como Mejor Película de Animación.

Coco (2017)

Si las festividades de otro mundo ya estaban en camino de convertirse en una pieza altamente comercializable  antes de 2017, Coco de Pixar encendió un fenómeno que hizo que su visibilidad llegara a audiencias en una escala global inexplorada. La aventura sigue a Miguel, un joven que ama la música, pero cuya familia ha renunciado a ella, mientras viaja inadvertidamente a la Tierra de los Muertos y se encuentra con sus parientes fallecidos, alebrijes coloridos y personajes de la cultura popular mexicana. Dirigida por Lee Unkrich y Adrian Molina, Coco recibió dos premios Oscar: Mejor Película de Animación y Mejor Canción Original por “Recuérdame”. En su versión en inglés, la película presenta las voces de estrellas de ambos lados de la frontera, incluidos Gael García Bernal, Benjamin Bratt, Edward James Olmos y Jaime Camil.

Día de Muertos (2019)

Desde 2012, el estudio Metacube, con sede en Guadalajara, trabajó en la película animada Día de Muertos, dirigida por Carlos Gutiérrez. Finalmente llegó a los cines de México el 1 de noviembre en 2019. La historia arranca en el pueblo mexicano de Santa Clara, donde una huérfana de 16 años llamada Salma nunca llegó a conocer a sus padres biológicos. Salma pasó la mayor parte de su vida dedicada a buscar pistas sobre la identidad de sus padres y su paradero con poca o ninguna suerte, hasta que descubre un libro especial que está lleno de historias de Santa Clara y de su gente. Con el libro en la mano, Salma se embarca en una aventura con sus hermanos adoptivos, Jorge y Pedro, para encontrar los eslabones perdidos de la herencia de su familia con la esperanza de que finalmente pueda conocer a sus padres. Cuenta con las voces de Memo Aponte, Fernanda Castillo y Alan Estrada.