¡Juan Diego Martínez Álvarez llega muy alto! / Foto de Ángel Llamas

La noticia dio la vuelta por todo el País: el tapatío Juan Diego Martínez Álvarez había establecido nada más y nada menos que tres Récords Guinness. No solo se había convertido en el mexicano más joven en subir al Everest, el 15 de mayo, también se posicionó como la persona que ha tocado una pieza de piano a mayor altura, y 27 horas después conquistó el Lhotse, la cuarta montaña más alta de la Tierra, sin aclimatación.

Al regresar a Guadalajara, platicó con Club sobre diferentes temas, desde los inicios de su afición hasta los motivos detrás de varios detalles de la experiencia, ¡entérate a continuación!

Foto tomada de @juandimtza

Juan Diego, apenas tienes 19 años y ya acumulaste varios récords, ¿cómo logra alguien tan joven estar listo para alcanzar estos triunfos?

Yo soy fiel creyente que la edad no define nada; tengo 19 años, te platicaba en la otra entrevista (para Cancha) que subió una persona de 66 años, todos con el mismo fin de llegar a la cumbre, entonces… qué padre, qué padre que tenga esa edad, qué padre que esté joven y que pueda agarrar una audiencia joven, pero… no define nada, fiel creyente, la edad es solo un número.

Foto tomada de @juandimtza

¿Desde qué edad nació tu amor por el alpinismo, y cómo y dónde fue que empezaste a prepararte?

Siempre me han gustado las montañas, yo hacía muchos hikes, a donde sea que fuera, y sí me gustaban bastante, pero como te platico, en agosto del 2021 fue cuando decidí ir por las montañas grandes, grandes, grandes, y empecé la trayectoria ahí.

¿Cómo ha sido el apoyo de tus papás, Mario Martínez y Viviana Álvarez, en esta carrera deportiva que estás siguiendo?

Muy grande, creo que es esencial que los hijos sientan el apoyo de sus papás o de sus seres queridos, porque… cuando no lo sientes… digo, a mí no me ha tocado sentirlo, pero lo he visto, y las personas a las que no las apoyan se vuelven como fríos, ¿sabes?, como que se rebelan. Pero bueno, he sentido mucho el apoyo de ellos, la verdad muy padre, muy agradecido, y ellos también vivieron una experiencia muy bonita, creo yo, también lo platican, de ir hacia el campamento base, porque es como un hike por las faldas del Himalaya, entonces ves todas las montañas y es como algo pequeño de lo que yo iba a vivir.

Foto tomada de @juandimtza

¿Te inculcaron tus papás esta afición, o fue algo que surgió en ti de otro modo?

No, surgió de mí; surgió el reto, más que nada el reto me llamaba la atención, y platicando junto con mis hermanos fue que decidí hacerlo, yo soy el más chico y somos seis, dos mujeres y cuatro hombres: Viviana, Natalia, Mario, Juan Carlos, Álvaro y Juan Diego.

¿Cuál característica tuya crees que te ayudó a romper tantos récords?

La disciplina; la perseverancia también, pero disciplina es única, porque es muy fácil motivarte, ves un video motivacional y te puedes motivar, pero te dura un rato, y la disciplina es como una motivación permanente, no importa el clima, no importa el día que sea: si tienes que entrenar, entrenas; si tienes algo que hacer, lo haces, porque habías quedado, porque te lo dijiste a ti y lo sigues, eso es la disciplina, entonces es muy importante tenerlo en la vida.

Foto tomada de @juandimtza

¿Por qué elegiste el récord “highest altitude piano/keyboard performance” (tocar el piano/teclado a mayor altura)?

Porque ponía todo un poquito más loco (risas), siempre me ha gustado el piano, como desde hace cinco años empecé a tocarlo, y me llamó muchísimo la atención, tocarla a esa altura, entonces, platicando con mi guía, él también es de esas personas que les gusta lo loco y los retos, y me dijo “yo te ayudo hacerlo”, y sí, lo hicimos. (Mi guía) se llama Nirmal Purja, le dicen “Nimsdai”, él subió los 14 ochomiles en seis meses, y el récord previo eran ocho años, y subió K2 en invierno, y lo hizo sin oxígeno, cuando nunca, nunca en la historia se había hecho, es muy de esa personalidad, y te lo contagia, en serio.

¿Cómo le hicieron para llevar el teclado de 20 kilos de peso hasta la cumbre?

La base pesaba 7 kilos y el teclado pesaba 13 kilos, lo cargaron los sherpas, de lo cual yo estoy demasiado agradecido con ellos, es impresionante lo fuertes que son, y prácticamente sin ellos no habría temporadas de escalar, porque ellos suben las casas de campaña, suben la comida, suben peso extra, utensilios, todo, entonces sin ellos, de verdad, no hay temporada, son muy fuertes, y son unas grandes personas, muy buenas personas.

Foto tomada de @juandimtza

¿Cuál pieza interpretaste?, ¿tenía un significado especial para la ocasión?

Se llama “Máquina del Ritmo” de Lynn Freeman Olson, fue la primera canción de piano que aprendí a tocar, y fue la canción que me inculcó el amor hacia la música, después de tocarla quise tocar más y más.

A la cima no solo llevaste la bandera mexicana, también ondeaste una imagen de la Virgen de Guadalupe, ¿por qué te propusiste esto?

La quise llevar porque siempre en mi vida desde chico ha estado, de hecho yo me llamo Juan Diego, y siempre he sido muy bendecido por ella, la hemos tenido muy presente siempre en mi familia. Ahí la dejé, hasta arriba.

Foto tomada de @juandimtza

En las alturas te diste un golpe en la espalda, pero te sobrepusiste, ¿cuál era tu motivación para seguir a pesar de las dificultades?

En la vida siempre hay dificultades, hay desde todo tipo y hay que aprender a levantarnos, y la tomé como experiencia, como enseñanza, y me paré con el dolor de mi corazón a seguir caminando, me sigue doliendo, fíjate, me sigue doliendo, le descansé y le seguí, no había de otra, si no, te mueres, si te quedas ahí te mueres, me tenía que mover.

¿Qué te dicen tus amigos de estos logros tuyos?

Mis amigos están felices también, me apoyaron también, hay veces que a lo mejor y no podía llegar a algún plan, siempre… fíjate que… estuvieron ahí, y a su manera también me ayudaron en lo que podían.

Foto tomada de @juandimtza

Luego de acumular estos triunfos a tan corta edad, ¿qué es lo que sigue?

Sigue agarrar todo lo que aprendí en la montaña y meterlo en la vida diaria, y así poderle sacar más provecho.

¿Qué mensaje de vida les darías a los jóvenes jaliscienses?

Siempre hay que tener una meta, siempre trabajar hacia la meta, y no cansarse y tener perseverancia y mucha paciencia, y tarde o temprano va llegar.

Foto tomada de @juandimtza

¡Síguelo!

Juan Diego Martínez Álvarez estudia Ingeniería Industrial en la Universidad Autónoma de Guadalajara; puedes ver más detalles de su hazaña en sus redes sociales.

+ Instagram: @juandimtza

Foto tomada de @juandimtza
  • Información: Club Redacción.
  • Fotos de retrato: Ángel Llamas. 
  • Fotos de la experiencia: tomadas de @juandimtza